¿De dónde viene la fábula de los peces que cuentan en ‘Soul’?

[ESTE ARTÍCULO CONTIENE SPOILERS DE SOUL]

Disney asestó un gran golpe a la exhibición tradicional estrenando Mulan directamente en streaming por un precio adicional. Golpe que ha inaugurado unos planes de futuro que contemplan la expansión de Disney+ como máxima prioridad, y que mientras van materializándose han ofrecido Soul como ofrenda de paz en Navidad. La nueva película de Pixar fue estrenada ayer en este servicio de streaming de forma gratuita (algo que no ocurrirá con la futura Raya y el último dragón), y los suscriptores se lo han tomado como un regalo navideño que, según gran parte de las críticas, vuelve a certificar el genio de Pixar a la hora de desarrollar fábulas capaces de estrujarnos el corazón.

Y sí, Soul quiere que llores. Pero también invitarte a la reflexión, con una contundencia que equipara la ambición de este film de Pete Docter y Kemp Powers con el éxito anterior que supuso Del revés. Soul, de hecho, es una película fundamentalmente existencialista que gira en torno a nociones tan amedrentadoras como el sentido de la vida, lo que hay después (y antes) de la muerte o el modo en que las pasiones nos definen. Hay quien diría que este arrojo no ha deparado en resultados tan excelsos como los experimentados anteriormente, pero lo que ahora ha de importarnos es desentrañar qué recursos ha utilizado el estudio para poner en pie una propuesta tan compleja.

Centrémonos, por tanto, en una de las escenas que mejor resumen la tesis de Soul: aquélla a mitad del metraje en la que Joe Gardner acaba de dar el concierto de su vida y se siente inesperadamente vacío. Dorothea, doblada por Angela Bassett, decide racionalizar lo que le ocurre recurriendo a una sencilla fábula: un pez le pregunta a un pez más viejo donde puede encontrar el océano. El pez viejo le contesta “¿el océano? Estás en él ahora mismo”, y el pez joven replica “¿Esto? Esto es agua, lo que yo quiero es el oceáno”. Esta suerte de chiste sirve para sintetizar el dilema de Joe: alguien tan empeñado en un propósito concreto que descuida el resto de facetas de su vida.

Sin embargo, no es una fábula que haya sido creada expresamente para el film. Y es que, con ciertas variaciones, el relato de Dorothea recuerda muchísimo al discurso más famoso de David Foster Wallace, escritor norteamericano de enorme influencia que tiene un monólogo llamado, precisamente, “Esto es agua”. Se trata de un discurso que Foster Wallace dio en el acto de graduación de los universitarios del Kenyon College, allá por 2005, y es uno que indudablemente ha inspirado la gestación de Soul, al ser introducido por una fábula muy similar a la que cuenta Dorothea.

Cómo a veces se nos escapa lo esencial

El relato de Foster Wallace dice así: “Están dos peces nadando uno junto al otro cuando se topan con un pez más viejo nadando en sentido contrario, quien los saluda y dice ‘buen día, muchachos, ¿cómo está el agua?’. Los dos peces siguen nadando hasta que pasado un tiempo uno se vuelve hacia el otro y pregunta ‘¿qué demonios es el agua?’”.

Se trata del punto de partida para un largo e inspirador discurso donde Foster Wallace anima a los estudiantes a tener una vida plena, explicando él mismo que “el punto de la historia es tan simple como que las realidades más obvias e importantes son con frecuencia las más difíciles de ver”. Una tesis que encaja  con lo narrado en Soul, donde Joe ha de aprender que existen cosas mucho más importantes que cumplir su sueño de ser un músico profesional de jazz, observando alrededor y permitiéndose disfrutar de los pequeños placeres de la vida.

Tesis que cabe rastrear en la totalidad de la obra de Foster Wallace, también de marcado corte existencialista y una en la que varios cineastas han hallado un gran atractivo. Aunque nadie se haya atrevido aún a adaptar La broma infinita, su obra cumbre, un año después de que se suicidara (en 2009), John Krasinski debutó en el cine previamente a Un lugar tranquilo con una personalísima adaptación de Entrevistas breves con hombres repulsivos.

A este film hay que añadirle en 2015 El final de la gira, adaptación del libro de David Lipsky Aunque por supuesto acabas siendo tú mismo (centrado en una larga entrevista que mantuvo con Foster Wallace) donde Jason Segel interpretaba al icónico escritor. Soul es, por tanto, la enésima muestra de que su legado está más presente que nunca.