2022 nos ha traído series para todos los gustos. Los seguidores de las fantasías épicas han podido disfrutar de apuestas tan ambiciosas como Los anillos de poder o La casa del dragón, mientras que las nuevas temporadas de Better Call Saul o Euphoria nos han vuelto a recordar que la pequeña pantalla es cada vez más grande.
Y, entre todas ellas, se ha colado Pam & Tommy, la apuesta de Hulu que en España hemos podido disfrutar en Disney+. Lily James y Sebastian Stan llevaban a la televisión el escándalo sexual protagonizado por Pamela Anderson y Tommy Lee en los años 90, cuando un vídeo íntimo de la pareja vio la luz a través de la prematura internet.
Megan Fox y su novio, el artista Machine Gun Kelly, se han inspirado en esta historia para sus disfraces de Halloween, metiéndose en los atuendos de la actriz de Los vigilantes de la playa y el batería de Mötley Crüe durante aquellos años 90 en los que vivieron una boda exprés, un robo surrealista y la primera cinta viral.
Para ser más específicos, la pareja ha optado por los looks de Anderson y Lee durante la apertura del Hard Rock Hotel & Casino en Las Vegas en 1995. Ella, además de ponerse melenón rubio, ha lucido el ajustado e icónico vestido en tonos rosas y granates de Pamela; él, con la clásica camiseta blanca y las gafas de sol del artista, se ha teñido de moreno y se ha llenado de tatuajes.
Las transformaciones no tienen nada que envidiar a las de Lily James y Sebastian Stan para la serie, tal y como podemos ver en la galería que ha compartido Fox en Instagram. "Son estos siquiera disfraces", apunta la intérprete, dando a entender que hay mucho de ellos en Pamela Anderson y Tommy Lee.
En las fotos, la pareja incluso recrea algunas de las poses de los protagonistas. Machine Gun Kelly también ha compartido varias imágenes comparando sus disfraces con el aspecto de los personajes reales, así como un vídeo en el que lo vemos esnifar sobre el pecho de su novia y por el que ha sido duramente criticado, tal y como apunta Mirror.
Recordemos que Pam & Tommy recuperaba uno de los episodios más controvertidos en la vida de Pamela Anderson. La trama, más allá de lo anecdótico (penes de silicona y demás excentricidades), servía como denuncia a aquella sociedad machista de los 90, y a la cosificación y sexualización sufridas por la protagonista.
¿Quieres estar a la última de todas las novedades de cine y series? Apúntate a nuestra newsletter.
Comentarios
Hemos bloqueado los comentarios de este contenido. Sólo se mostrarán los mensajes moderados hasta ahora, pero no se podrán redactar nuevos comentarios.
Consulta los casos en los que 20minutos.es restringirá la posibilidad de dejar comentarios