10 cosas que (probablemente) no sabías de la primera 'Jungla de cristal'

10 cosas que (probablemente) no sabías de la primera 'Jungla de cristal'

John McClane visita nuestras pantallas estos días por quinta vez y los nostálgicos de Jungla de cristal repetimos, como cada ciertos años, nuestro mantra: Las mejores son la uno y la tres, sobre todo la uno. Y es que la primera aventura de nuestro héroe, todavía con pelo y a las órdenes de John McTiernan es un referente para los amantes del cine de acción que todavía no ha conseguido ser superado, por muchos nuevos secundarios, villanos y efectos especiales que se le quieran ir añadiendo a la saga. Hoy volvemos la mirada atrás hacia ese encanto ochentero del Nakatomi Plaza, de Hans Gruber, de Reginald VelJohnson y cómo no, de John McClane.

Los tres alemanes

En la versión original de Jungla de cristal que se estrenó en los cines, los terroristas hablan un alemán lleno de errores gramaticales, utilizando en ocasiones frases sin demasiado sentido. Tanto es así, que en la versión alemana de la película, Hans Gruber y sus esbirros eran simplemente europeos. Este error fue subsanado en ediciones posteriores de la película para el consumo doméstico, doblando por encima las voces de todos los terroristas, excepto la de Hans.

Sólo dos de los terroristas son realmente de origen alemán, aunque hay un tercer alemán en el reparto: Bruce Willis, nacido en Idar-Oberstein en 1955.

Nakatomi Plaza, un rascacielos fotogénico

Además de John McClane y Hans Gruber, el tercer protagonista de la cinta es el propio edificio en sí. El Nakatomi Plaza, sede de la empresa del mismo nombre en la ficción, realmente es el Fox Plaza, propiedad de la Twentieth Century Fox. El rascacielos, terminado un año antes del rodaje de la película, ha servido de escenario para otros films. Lo podemos ver en la primera escena de Speed, a lo largo de toda Cabezas huecas (el estudio de radio que asaltan Brendan Fraser y su banda se encuentra en la misma plaza) e incluso durante unos breves instantes al final de El club de la lucha (parte izquierda de la pantalla, el segundo en hacer explosión).

¿Qué significa yippee ki yay?

Así como James Bond tiene que tomar un Martini con Vodka en todas sus películas, John McClane tiene que soltar su Yippee ki yay, hijo de puta cada vez que liquida al malo de la entrega en cuestión. Existe mucho debate entre los fans sobre cuál es el verdadero significado de la expresión, llegando a leerse teorías como la que afirma que es una traducción de cómete eso en urdu (lengua de Pakistán). La interpretación con más sentido, sin embargo, es la que relaciona el Yippee ki yay con el argot de los vaqueros, una especie de grito de júbilo del far west. Esto sí encaja con la primera vez en que John McClane utiliza la expresión, poco después de que Hans le acuse de haber visto demasiadas películas de vaqueros.

Cuando Bruce Willis se cruzó con La Voz

Jungla de cristal está basada en la novela de Roderick Thorp Nada dura para siempre (Nothing lasts forever), que a su vez era la segunda parte de otra novela, El detective. Este primer libro fue llevado al cine en 1968 en una película que protagonizó Frank Sinatra, y por este motivo se le ofreció al propio Sinatra protagonizar Jungla de cristal. Toda vez que La Voz tenía 73 años por aquel entonces y no parecía lógico convertirle en héroe de acción, fue Bruce Willis quien acabó interpretando a McClane. Willis no había trabajado mucho para la gran pantalla en 1988, pero sí que podía presumir de haber aparecido por primera vez en escena en 1980, en la película El primer pecado mortal. Un pequeño cameo en el que tiene el honor de cruzarse con... Frank Sinatra..

¿Bruce Willis como héroe de acción? ¡Venga hombre!

Bruce Willis, que para 1988 sólo había protagonizado la película Cita a ciegas, así como cinco temporadas de Luz de luna, no parecía el actor más indicado para convertirse en el héroe que Jungla de cristal requería (un poco más que Sinatra sí, pero seguía siendo un actor de comedia). Tanto fue así, que la opción Willis sólo surgió después de que otros cinco actores rechazaran el papel. A saber, y por este orden: Arnold Schwarzenegger, Sylvester Stallone, Burt Reynolds, Richard Gere, Harrison Ford y Mel Gibson. Cuesta imaginar a Gobernator arrastrándose por los conductos de ventilación del Nakatomi Plaza, casi tanto como a Bruce Willis haciendo de Terminator.

John Bolsón, un hobbit en Nakatomi

John McClane se descalza poco después de llegar a Los Ángeles, y por avatares del destino, pasa el resto de la película descalzo (los terroristas que mata tienen pie de chica), lo cual resulta muy engorroso cuando se vive a limpio tiroteo en un edificio en obras. Para las escenas en que Bruce Willis debía correr sobre cristales rotos, se le diseñaron unas botas de goma con aspecto de pie, al más puro estilo Frodo Bolsón (con menos pelo). Los más geeks podrán ver, cámara lenta o pause mediante, que en estas secuencias, McClane tiene los pies más grandes de lo habitual.

Mirad, es Carl Winslow, ¡tiradle Twinkies!

Reginald VelJohnson aparece en las dos primeras entregas de Jungla de cristal como compinche y confidente accidental de John McClane, y aunque se granjeó cierta fama con el papel, en España se le recuerda más por dar la réplica a Steve Urkel en la serie Cosas de casa. En su primera aparición en la película que hoy nos ocupa, nos encontramos a Al Powell (VelJohnson) comprando una respetable cantidad de Twinkies (un bollo relleno de crema, popular en Estados Unidos), y más tarde vemos cómo su coche, después de accidentarse, está lleno de ellos por todas partes. Tanta fama de zampabollos se ganó VelJohnson en la época, que, como reconoció posteriormente, la gente le arrojaba Twinkies por la calle, o se los introducía por la ventanilla del coche si le veían pasar.

John McClane en la Mansión Playboy

En Jungla de cristal podemos ver dos apariciones estelares, con escasa relevancia y menos ropa, de dos de las chicas de Playboy de la época. La primera es Kym Malin, playmate de mayo de 1982, pillada in fraganti por los terroristas durante la fiesta, poniéndose cómoda en una de las habitaciones del Nakatomi Plaza, y la segunda es Pamela Stein, playmate de noviembre de 1987. Haciendo un juego de palabras malo (especialidad de la casa), podría decirse que Stein sí tiene un papel en la película, ya que aparece en el poster que McClane utiliza de referencia cuando investiga los pasillos del rascacielos. Algún operario la puso allí.

Lo que pasa en Pearl Harbor queda en Pearl Harbor

James Shigeta interpreta al Señor Takagi, máximo responsable de la compañía Nakatomi y primer objetivo de los terroristas liderados por Hans Gruber para acceder a la caja fuerte. Antes de que comiencen las hostilidades, Takagi bromea con McClane, recién llegado a la fiesta, sobre la invasión de Estados Unidos por parte de Japón: Lo de Pearl Harbor salió mal, así que lo intentamos con la tecnología. Y tanto que salió mal. Tal vez Shigeta lo dijera con información de primera mano, ya que una década antes de aparecer en Jungla de cristal, había encarnado al Almirante Chuichi Nagumo en Midway, película que recrea la derrota de la flota japonesa en el Pacífico en 1942.

A la de una, a la de dos...

Una de las escenas más memorables de la película es la caída a cámara lenta de Hans Gruber desde la ventana del rascacielos. Para rodar esta escena se dejó caer a Alan Rickman a una colchoneta desde una altura aproximada de siete metros, y para darle mayor realismo a la cara de susto del actor, el encargado de stunts que le sujetaba le jugó una mala pasada: Dijo que contaría hasta tres, pero no llegó tan lejos.

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