Crítica de 'El rey de todo el mundo'

Vuelven Carlos Saura y Vittorio Storaro a plasmar su pasión por el folclore de raíz latina. En este caso, el pasaporte artístico los lleva hasta México, tierra de lloronas, mezcales, tequilas y reyes sin corona. Debería funcionar, pero tan solo lo hace a medias. La trama, con el sempiterno juego entre teatro, ficción y realidad, es endeble. Sin embargo, el gran problema reside en su puesta en escena. El filme tiene un indefinible e inquietante aire anacrónico, y tal vez el empresario hostelero y celebrity Kike Sarasola nos dé alguna pista. 

No es una cuestión de talento, sino más bien de presupuesto o de momento histórico. Lejos quedaron los años en los que España se codeaba culturalmente con el resto del planeta. Los años en los que desde el gobierno se financiaba la alta cultura que filmaba Saura. Los años de los grandes estudios y los recursos, si no ilimitados, sí generosos. Y eso, tristemente se traduce en una producción dificultosa, pero también en las imágenes, en las interpretaciones y en el trabajo de Storaro.

Saura introduce originales reflexiones acerca del cuerpo danzante. Así, la obra que deben representar tiene a una bailarina en silla de ruedas como protagonista. Se agradece su intento por dignificar el culebrón made in Televisa, pero el resultado final está lejos tanto de sus obras maestras musicales como de películas menos ambiciosas como Flamenco, flamenco o Iberia.

FICHA TÉCNICA

El rey de todo el mundo

• Director:

  Carlos Saura

• Género:

  Musical

• País:

  España

• Sinopsis:

  En un pequeño pueblo de México tiene lugar el encuentro entre cuatro jóvenes bailarines que han audicionado para el papel en el próximo musical de Manuel, quien busca hacer una obra nueva y original junto a su exesposa Sara.

• Guion: Carlos Saura

• Duración: Isaac Hernández, Greta Elizondo, Giovanna Reynaud, Ana de la Reguera, Enrique Arce

• Reparto:

• Veredicto: Un chupito de Saura es una botella de cualquiera.
  

• Distribuidora: Syldavia

• Estreno: 12/11/2021