OPINIÓN

La versión española de La Momia: con tetas y franquista

La versión española de La Momia: con tetas y franquista
La versión española de La Momia: con tetas y franquista
La versión española de La Momia: con tetas y franquista

Mi intención de contrastar el estreno de la última versión de La Momia con alguna de sus escasas réplicas hispanas terminó desembocando en un auténtico reto. El film elegido, La Momia Nacional, ha resultado ser uno de los mayores desafíos de mi carrera como Crítico de Mierda. Simplemente: NO HAY DIOS O HUMANO QUE AGUANTE este auténtico bodrio español.

La Momia Nacional aparece en 1981, con las comedias chungas de Esteso y Pajares arrasando en taquilla con sus comedias chuscas de destape. Una de ellas, Polvos Mágicos, había funcionado bastante bien. Aunque al productor José Fradé no le hacía gracia la película, quería más: más tetas, más monstruos y más caricatos.

El guión se encargó al veterano Juan José Alonso Millán, autor de libretos como Historia de S o La Masajista Vocacional. Para dirigir, volvió a confiar en José Ramón Larraz, que gozaba de cierto prestigio gracias a su film de culto Las Hijas de Drácula, que probaba también suerte en la comedia. El resultado es su película más terrorífica, las más difícil de mirar y la que más hace sufrir al espectador.

El tono del film es fijado rápidamente por la insoportable canción que suena en los créditos, donde nos cuenta que la momia está cachonda, tiene un consolador y nosequé hostias. Se supone que nos debe de dar risa, pero lo que provoca es desasosiego y vergüenza ajena. Ejemplo perfecto de lo que será toda la película.

El explorador Felipe (Quique Camoiras) ha vuelto de un largo viaje por Egipto. Es recibido en la mansión de su libidinoso amigo Saturnino (Francisco Algora), su ama de llaves y el servicio, entre el cual está la gran Paloma Hurtado.

La versión española de La Momia: con tetas y franquista

Felipe trae varias novedades de su viaje: por un lado, el sarcófago de la momia Elisa, una joven que fue violada y asesinada hace 2000 años. Por otro, presenta en sociedad a su hija Ana Mari Capullo (la guapa Azuzena Hernández), una joven lozana y algo borde cuyo culo y tetas no dejaremos de ver en primeros planos a lo largo de la película.

Esa noche hay luna llena. Y la luna llena, ya saben, trae siempre consecuencias. Por un lado, la momia despierta, “condenada a tener furor uterino por toda la eternidad”. La momia busca venganza violando a cualquier hombre que encuentre en su camino. Bajo las ventas se adivinan unas esculturales formas femeninas, que son confirmadas cuando vemos sus tetas egipcias.

Ah, y mientras, Felipe se convierte en hombre lobo.

La versión española de La Momia: con tetas y franquista

Saturnino lleva a su hermano Felipe a un asilo mental… donde les atienda nada menos que Nosferatu (Carlos Lucena) en una escena, diseñada para cachondearse de la película de Werner Herzog tan aclamada. Ah, se hace llamar “Doctor Cabezas” a todo esto.

Al día siguiente, en un picnic, un psyco-killer ataca a Paloma Hurtado, cortando uno de sus brazos. Esa misma noche, el vampiro / doctor, despierta a sus tres vampiras, a las que pone a trabajar en un burdel “a putear, a putear. A sacarle la sangre al contribuyente”. El nivel.

Tras una escena gilipollesca en el burdel de las vampiras, llegamos al clímax de la película. La momia resucita, y resulta estar poseída por… Tejero, aunque yo creo que lo de “momia” lo querrían aplicar más a Franco y se quedaron con las ganas. En todo caso, esta momia de derechas se dedica a perseguir a Saturnino al grito de “Se sienten… se sienten coño”.

Aunque tenemos vampiros, momias, hombres lobos y una asesina psicópata, la película es, un recital del peor humor verde, con señores persiguiendo jóvenes y aferrándose con fruición a sus pechos. El contingente de chistes sexuales es enorme, aunque quizá menos al de un episodio de La que se avecina. En eso, la película sigue entroncando con lo que hace reír a los españoles.

La versión española de La Momia: con tetas y franquista

La película, efectivamente, tiene trazas de una revista protagonizada por Juanito Navarro o, claro está, Quique Camoiras. La sal gorda es complementada por decenas de chistes coyunturales sobre la UCD, los políticos y futbolistas de la época, Comisiones Obreras, José María García, el golpe de estado, anuncios de moda… Todo ello convierte el humor del film en impenetrable para el espectador actual, Pornosawas aparte. Lo peor es que… en su día tampoco resultaba especialmente graciosa.

Porque esto es un mamotreto sin pies ni cabeza: es absolutamente ridícula hasta el punto que el espectador termine confundido e incapaz de seguir el hilo. Los personajes hacen idiotez tras idiotez sin demasiada gracia, las situaciones planteadas no son especialmente interesantes y el film se salta sus propias reglas constantemente.

La sensación de improvisación, de descuido, es constante y cargante. Tanto así es así que hasta los chistes se repiten hasta terminar aburriendo: hay como 6 o 7 del aceite de colza, 10 del Doctor Cabezas, nosecuantos de Carrillo y Suarez… No es de extrañar, por tanto que ni en su día levantara pasiones. Porque tiene muy poca gracia. Y os juro esto no lo digo por prejuicios: algunas de mis mejores amigas son momias.

La versión española de La Momia: con tetas y franquista

Larraz no nos escatima planos de tetas de jovencitas… pero en un giro que a veces nos deja algo locuelos, tiene más de una escena gore que sorprende y da algo de carácter a un film ramplón. En todo caso, no bastan para hacer distraída uno de los films más insoportables del cine español.

La taquilla fue tibia, y el guionista añadió el humor de los ZAZ y Mel Brooks a su repertorio, dando lugar a cosas más potables como Cristobal Colón, de Oficio Descubridor, dirigida, de nuevo, por Ozores. Eso sí: sin dejar de hacer chistes de Jose María García, Suarez y las autonomías. Larraz y él volvieron a probar suerte juntos con Juana la Loca (de vez en cuando), con resultados bastante inferiores a la de Colón. Larraz volvió al terror que se le daba mejor. Ser Ozores, por chusco que nos pareciera, no es tan fácil.

Mostrar comentarios

Códigos Descuento