¡Blogueros! ¿Cómo no quereros?

Creo que salió publicado en distintos medios hace unos meses, pero aun así lo vuelvo a decir: mis compinches y yo hemos grabado unos programas de sketches para Neox y… ¡que me aspen si no son el recopetín! Son tan brillantes que no se les puede mirar fijamente.

El hecho de que no se hayan estrenado todavía se debe a que son tan buenos que están esperando el momento justo para emitirlos. “Esto no se puede hacer al tuntún”, como me dijo un programador de la cadena, y luego se puso a reír y a llorar a la vez y después creo que se cagó encima.

El caso es que estoy seguro de que a la gente normal, a la gente con buen fondo, esa gente que sonríe cuando ve una paloma volar y baila haciendo el robot, les van a encantar los programas de principio a fin. Pero también sé que hay personas que los van a poner fatal sin necesidad de haberlos visto antes. Son personas mordaces, que diseccionan la televisión con sus afiladas plumas. Son personas que tienen blogs.

Y aunque digo que no me importa lo que opinen, la verdad es que sí que me importa. Y la otra noche no pegué ojo pensando lo que iban a escribir sobre nuestro programa. Y al día siguiente me cogí una cogorza impresionante y tenía que ir a recoger a mi hijo a las actividades extraescolares y se me olvidó. Y esto último fue por culpa de esta gente, y se lo dije a mi mujer y se me quedó mirando con los ojos como platos. Así es que he decidido contestarles antes incluso de que escriban sus críticas. Allá voy:

Queridos blogueros, sois todos unos guionistas fracasados y me importa una mierda lo que opinéis sobre nuestro trabajo. Y no es verdad que hagamos siempre lo mismo, y lo nuestro es el humor inteligente y si no lo entendéis, peor para vosotros. Y eso.