Battlefield 4 - Un paso al frente

Que EA ha hecho los deberes con la saga Battlefield no debería sorprender a nadie. Ya la anterior entrega suponía un salto es cuanto espectacularidad y realismo gracias su motor gráfico Frosbite. Y aunque la diferencia entre Battlefield 3 y 4 no es tan grande como con las anteriores entregas, sí que hay una evolución. Lo más llamativo son los efectos atmosféricos, especialmente espectaculares en las consolas de nueva generación y lo que EA ha llamado “levolution”. Éste es un nuevo sistema de destrucción dinámica de los entornos. Todavía podría perfeccionarse algo, pero era algo que los jugadores (y el realismo del juego) pedían a gritos: que si una estructura sufría daños suficiente pudiera derrumbarse.

Si visualmente el juego es arrollador, y supone uno de los mejores acabados gráficos que se pueden encontrar hoy en el mundo de los videojuegos, tengo que destacar que el apartado sonoro es también sobresaliente. Hay muy pocos títulos que consigan crear una atmósfera como Battlefield. Hablamos de algo más que el sonido de las armas o una potente banda sonora. Battlefield 4 crea una auténtica atmósfera sonora en calles, interiores y espacios abiertos que supone una aproximación sonora a la realidad similar a la que consigue con sus gráficos. Evidentemente, es algo que se disfruta con la consola conectado a un buen sistema home-cinema, pero también con unos buenos cascos.

Otro punto en el que que Battlefield ha mejorado ostensiblemente es en la creación de una historia. En este aspecto, la campaña para un jugador, Battlefield aquejaba una anodina falta de ideas, pero desde Battlefield 3 el jugador puede disfrutar de una intensa e interesante historia en solitario. No sólo el guión presenta buenas ideas, su puesta en escena, con increíbles momentos épicos, y las interpretaciones virtuales de los actores (tan bien representados visualmente) conseguían eso tan manido de “meterte en el juego”. Battlefield 4 continúa la historia de su predecesor y nos lleva tras las líneas enemigas en una guerra que Occidente está perdiendo contra un imparable avance asiático.

El modo multijugador es sin duda la gran baza de Battlefield 4. Seguramente sea uno de los grandes juegos de este año para disfrutar en línea. A lo que sería una suma de todos los aciertos anteriores de EA se suman un buen puñado de nuevas y buenas ideas. El nuevo “Commander Mode” invita a tomar un puesto de mando global respecto a las partidas multijugador, realmente masivas, con nuevas armas y vehículos y posibilidades, como la de afectar al terreno para perjudicar al contrincante.

A pesar de todo y del buen acabado, técnicamente esta gran producción de EA tiene algunos fallos técnicos importantes. No son muchos, pero los hay y traen de cabeza a bastantes usuarios. Más allá de que el juego presente algunos bugs, como personajes que atraviesan a otros o a elementos de los escenarios, o vehículos que explotan en el aire y quedan suspendidos y girando alocadamente sobre nuestras cabezas, el juego tiene algunos fallos de rendimiento que hacen que ordenadores y consolas (incluida la versión PS4) se cuelgue en algunos puntos. Seguramente sea algo que se pueda solucionar en el futuro con un simple parche, pero ojalá este tipo de errores, cada vez más abundantes, fueran solucionados antes de la salida a la venta de los juegos.

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