La operación asfalto está avanzada, pero todavía sin culminar, y algunos de los túneles más relevantes para el tráfico de la ciudad siguen con carriles cortados o directamente cerrados. Hace ya unos años que es imposible pensar en un Madrid sin obras en verano. Y este año, las obras continuarán en septiembre y en algunos casos se alargarán aún más. Entre los enclaves todavía en obras, destacan la Gran Vía y los túneles de María de Molina, Costa Rica y Pío XII, que lleva ya más de seis meses bloqueado.

Aunque los madrileños están acostumbrados a las obras, este verano han estado "ante la mayor operación asfalto de la historia de la ciudad", según explicó el delegado de Desarrollo Urbano Sostenible del Ayuntamiento de Madrid, José Manuel Calvo, a comienzos de verano, cuando se presentó el proyecto.

Las actuaciones se han extendido a 320 calles de Madrid, siendo la de Gran Vía, dada su ubicación, una de las que ha tenido mayor incidencia. En este caso, las obras todavía continúan y durarán hasta noviembre. El Ayuntamiento anunció que inaugurará la reforma de esta arteria el próximo 24 de noviembre, coincidiendo con el alumbrado navideño.

Según ha explicado el Ayuntamiento de Madrid, el trabajo de conservación de calzadas ha acarreado incidencias de tráfico en el distrito de Fuencarral, en el túnel de Sinesio Delgado; y en Hortaleza, en la Gran Vía de Hortaleza-Costa Rica.

El túnel de María de Molina, en obras hasta el 8 de septiembre, ha abierto sus accesos desde el paseo de la Castellana a López de Hoyos y María de Molina, pero se espera la apertura del carril derecho de entrada, permaneciendo el corte en sentido A-2. Como consecuencia, el Ayuntamiento recomienda usar el transporte público.

La línea 9 del suburbano vuelve a la normalidad tras las obras iniciadas a principio de verano. Mientras, la línea 2 espera recuperar su actividad a expensas de la reapertura de la estación de Sevilla. De momento, la línea 7b entre Hospital del Henares y Estadio Metropolitano tiene prevista su apertura para el 15 de septiembre.

Otras estaciones que tardarán en reabrir se encuentran en la zona sur. La línea 12, en su tramo entre Móstoles Central y Juan de la Cierva, se pondrá en marcha a partir del próximo 14 de octubre. Para estas líneas se ha destinado un servicio de autobuses.

La línea 1 recuperará el tramo entre Tribunal y Sol después de su cierre con motivo de los trabajos de retirada de amianto, que forman parte del Plan de desamiantado del suburbano, de la estación de Gran Vía. Esta labor ha sido llevada a cabo de manera simultánea a las otras reformas que se está realizando en dicha estación: la conexión con Cercanías Sol y la instalación de nuevas escaleras y ascensores.

Todas las líneas de Renfe han vuelto a la normalidad el pasado 31 de agosto después de que se vieran afectadas durante todo el período estival por las obras realizadas en el túnel de Pío XII, el cual pasa por debajo de la playa de vías de la estación de Chamartín.

Según Adif, las mejoras realizadas han tenido como objetivo "eliminar las filtraciones de agua en el túnel que comunica las calles Pío XII y Sinesio Delgado". Su coste superó los 3 millones de euros.

La parte de la renovación impulsada por el Ayuntamiento de Madrid se ha centrado en mejorar las condiciones del pavimentado, la seguridad de las vías, disminuir los niveles sonoros de rodadura y reducir la contaminación del aire, uno de los problemas principales de la capital. Ha afectado a calles, túneles, pasos inferiores, tramos de la M-30 y partes de la A-42 y del anillo verde ciclista.

Ante las múltiples quejas de la ciudadanía por el mal estado de las calzadas, el Ayuntamiento ha decidido incrementar –casi el doble– la inversión en su mantenimiento y remodelación.

Desde 2015, el Gobierno ha destinado más de 85 millones de euros. Esta última inversión se realiza a un año vista de las elecciones municipales de mayo de 2019.