Los escoceses Travis regresan a los escenarios para celebrar las casi dos décadas que cumple su disco The Man Who (1999), su segundo trabajo y el responsable de su éxito allá por principios de los dos mil.

Como parte de esta gira aniversario, el grupo pasará por España en dos ocasiones dentro del Room Festival. Primero actuarán en la Sala la Riviera este domingo 3 de junio; y luego trasladarán su directo a la Ciudad Condal el lunes día 4 en la Razzmatazz.

"Parecía el momento adecuado para revisitar el disco", asegura el bajista Douglas Payne en conversación con 20minutos. El grupo "nunca" ha interpretado The Man Who al completo y los autores de Why Does It Always Rain On Me? no podían "esperar a que cumpliese veinte años" para probar a tocarlo en directo.

Con este álbum, Travis se colocó en el panorama internacional como referentes musicales de un estilo sosegado y sensible, frente a la tendencia agresiva de la escena de la época. Como resultado, el disco pasó once semanas en el número 1 y ganó el premio BRIT a mejor álbum del año.

The Man Who es "algo maravilloso que se mantiene como tal incluso después de todos estos años", rememora melancólico Payne. "Es importante para la banda porque nos puso en el mapa", ilustra el bajista.

Para la crítica, este es sin duda su disco más memorable, aunque para el grupo todos sus trabajos son "como Polaroids de nuestra vida".

No se puede entender el éxito de este disco sin su "pieza fundamental", Nigel Godrich, productor asiduo de Radiohead y de The Man Who, que logró trasladar el talento del grupo gracias a la confianza que surgió entre ambas partes.

Un álbum que encierra himnos como Driftwood y Writing To Reach You y que cumple casi dos décadas desde su publicación. "La vida cambia a la gente, pero insólitamente el grupo se mantiene igual", explica Payne, "nos conocemos desde antes de formar el grupo, así que quizás la amistad sea la roca que nos sostiene a pesar de los altibajos".

Una hermandad que les ha impulsado para continuar con su proyecto musical, a pesar de no haber cosechado la misma fama que otros grupos con los que muchas veces se les compara, como Keane y Coldplay, y que empezaron a crecer a la par que los escoceses.

Preguntados por este segundo puesto permanente, el grupo responde tajante: "Los críticos siempre nos han odiado. Ahí está el motivo".

Precisamente aprovechando este amor-odio de los críticos, Travis ha encontrado la clave perfecta para presentar el documental Almost Fashionable - A Story About Travis en Cannes y en el Festival de Cine de Edimburgo.

Francis Healy, líder y vocalista del grupo, invitó al periodista musical Wyndham Wallace a participar en la cinta, en la que pretendía grabar su paso por los escenarios de México.

"Probablemente seamos más populares en aquellos lugares con sociedades pasionales, honestas, emocionales y que no tienen miedo a expresarse", considera Payne sobre el cariño que este país de Latinoamérica les profesa y que queda reflejado en la cinta.

Wallace, uno de estos críticos que no llegaba a odiar a la banda, sino que más bien los recordaba con indiferencia, aceptó el reto. Como resultado, Travis presentan un documental con el que pretenden cambiar su imagen de grupo de segunda y demostrar su potencia en directo.

"La gente siempre se muestra reticente a la hora de cambiar su opinión sobre cualquier cosa, sin importar los argumentos que les presentes. Lo más complicado es mantener una mente abierta. Pero no somos ni aburridos, ni depresivos en directo; lo prometo", subraya Payne.

Travis continúan intentando quitarse los nubarrones que siempre les han alejado del éxito que quizás se merecían y preguntándose por qué siempre llueve sobre su talento.

Mientras, pueden seguir disfrutando de situaciones insólitas que les ocurren de gira, como "ver el Gran Prix de Singapur con The Backstreet Boys a un lado y el rey de Tailandia al otro".