Así lo ha señalado el diputado de Medio Ambiente, Manuel Rufino García, quien ha dado cuenta de las actuaciones, de las que cerca del 60 por ciento correspondieron a la atención de emergencias.

En este sentido, según los datos aportados en el balance anual, el servicio recibió 1.221 avisos de este tipo para atender incendios, accidentes de tráfico, rescates de personas y actuaciones por materias peligrosas.

En cuanto al porcentaje, Rufino García ha detallado que el 76,4 por ciento de las emergencias corresponden a incendios (934); el 6,55 por ciento a accidentes de tráfico (80); el 7,2 por ciento a rescates de personas (89); el cuatro por ciento a inundaciones (85); y hubo 33 intervenciones en materias peligrosas (1,6 por ciento).

Asimismo, los profesionales de los trece parques que trabajan en el Servicio de Extinción de Incendios de la provincia realizaron 823 actividades dedicadas a la prevención, mantenimiento y otras actuaciones que "refuerzan la seguridad colectiva".

Los parques de la provincia que registraron una mayor actividad, son los que atienden a un mayor número de población: Villares de la Reina (28 por ciento), Béjar (19 por ciento) y Ciudad Rodrigo (17 por ciento), ha especificado.

Durante su intervención, el diputado de Medio Ambiente también ha querido reconocer la labor que desempeñan los profesionales de los parques de bomberos de la provincia para ofrecer "una respuesta rápida y eficaz" a las emergencias que se reciben.

Manuel Rufino García ha insistido en que, para la Diputación de Salamanca, se trata de un servicio "prioritario", que se caracteriza por ser "moderno, eficaz, coordinado y profesional" y que cuenta cada año con un presupuesto de 2,1 millones de euros.