La búsqueda de Gabriel se centra en el entorno familiar

Los agentes siguen acotando el círculo en torno a la desaparición de Gabriel Cruz en Níjar: continúan recabando información, afinando los detalles y contrastando las primeras versiones. Ahora la investigación también pone el foco muy cerca del entorno familiar. Varias fincas y viviendas privadas, aledañas a la casa de la abuela, han sido objeto de registro durante este sábado. Desde el pasado 27 de febrero, pocas o ninguna han sido las pistas que han arrojado luz al caso. Una furgoneta blanca que varios testigos afirman haber visto por la zona, pero de la que no ha trascendido información. Un hombre detenido, obsesionado con Patricia, la madre de Gabriel, que se deshizo de su pulsera de control el mismo día en el que se perdió el rastro del pequeño, pero de quien no se han encontrado indicios que lo relacionen con la desaparición. Y una camiseta, que no constaba en el listado de ropa que el padre y su pareja detallaron a la Guardia Civi, pero que sí tiene el ADN de Gabriel. Si la llevaba puesta en el momento de su desaparición o no, todavía no se sabe. Fue hallada por la pareja del padre de pequeño, en un terreno ya inspeccionado, una prenda con muchas incógnitas en torno a ella. Por el momento las pruebas no son concluyentes y los padres se siguen aferrando a la idea de que su hijo ha sido secuestrado.