El Indicador de Confianza Empresarial (ICE) de Aragón se ha mantenido estable en su máximo histórico del 13,7 durante el segundo trimestre del año. Sin embargo, alumbra un potencial cambio de tendencia, ya que los empresarios consultados valoran en positivo la situación del segundo trimestre y muestran mayores cautelas respecto a las perspectivas para el tercero.

El índice, que elabora la Fundación Basilio Paraíso de la Cámara de Comercio, Industria y Servicios de Zaragoza, en colaboración con Ibercaja, recoge la situación de las empresas aragonesas en el segundo trimestre de 2016 (abril-junio) y sus expectativas para el tercero (julio-septiembre).

El ICE realiza cada trimestre el análisis más detallado que existe sobre la opinión empresarial de Aragón, con una serie histórica de más de una década. El dato oscila entre +100 y -100; los valores positivos señalan avances en la actividad y los negativos, retrocesos. Su metodología se basa en entrevistas a empresas, que exponen su visión de la coyuntura en 7 variables: facturación, empleo, inversión, precios de venta, exportaciones, morosidad y endeudamiento. Además, responden también sobre los factores que limitan la actividad.

El Indicador se alinea con el buen dato de crecimiento publicado para el conjunto de la economía española del segundo trimestre de 2016. No obstante, si en el primer trimestre las expectativas de los empresarios eran superiores al balance sobre la situación económica, en el segundo trimestre ocurre justo lo contrario.

Las expectativas decrecen hasta el 10,6 (el dato del primer trimestre era del 15,4), mientras que el indicador de situación repunta y alcanza un valor de 16,8 (frente al 11,9 anterior). Con todo, el optimismo sigue dominando las percepciones de los empresarios para 2016 aunque puede inferirse un aumento de la incertidumbre, en línea con las perspectivas económicas que pronostican una leve desaceleración de la actividad económica en España.

Por sectores, la confianza de industria y construcción repunta con fuerza y se sitúa en el 14 (frente al 12,5 anterior), el dato más positivo desde 2006. Por su parte, comercio y servicios arrojan un nivel de confianza (11,3) levemente inferior al del primer trimestre del año (12,2).

Las ventas se han convertido en el indicador del ICE que logra un mejor comportamiento, por encima del empleo y la inversión, ya que más del 50% de las empresas de Aragón ha mejorado la facturación en comparación con el trimestre anterior.