Según han explicado a Europa Press desde el colectivo ecologista, han acompañado su denuncia de material gráfico, concretamente de fotografías "tomadas este mismo jueves" en las que pueden apreciarse "unas emisiones rojizas que no son otra cosa que metales pesados".

Al respecto, han apuntado que los metales pesados acaban entrando en la cadena trófica y "son acumulables, es decir, que no se degradan", por lo que "al final terminan generando un problema epidemiológico".

Por otra parte, han criticado que la Delegación Territorial de Medio Ambiente de la Junta en Cádiz diera el visto bueno al procedimiento de la revisión de la autorización ambiental

integrada para sus instalaciones en Los Barrios (Cádiz), ya que, según Verdemar, "los vertidos siguen produciéndose de la misma manera e incluso con más frecuencia".

Por tanto, y tras las alegaciones presentadas, los ecologistas "no están de acuerdo con las conclusiones de mejoras técnicas a las que supuestamente se ha sometido la acería".

POSIBLE AMPLIACIÓN

En este punto, han manifestado su sospecha de que todo esto responde a que "se está preparando una ampliación y ocupación de territorio junto a la población de Palmones, en Los Barrios", y ello "con conocimiento de la Junta".

Los ecologistas han mostrado su oposición subrayando que Acerinox cuenta con "más de un millón de metros cuadrados de superficie y cada vez asfixia más a la población". Han agregado que esta fábrica de acero "está produciendo más de un millón de toneladas al año, lo que hace que los vertidos atmosféricos y residuos del acero sean mayores y estén ocasionando una crisis ambiental en las zonas donde se vierten".

A ello, han añadido que la gestión de los residuos procedentes de los procesos y subproductos "es deficiente" y, además, "están colmatando vertederos que en el futuro pueden afectar a los acuíferos colindantes con contaminantes químicos".

Desde Verdemar han alertado también por los "vertidos en la población que siguen generando las emisiones difusas de partículas generadas por el almacenamiento a cielo abierto", sin olvidar el "ruido ensordecedor" que genera la factoría y que hace que los vecinos padezcan "unos niveles de contaminación acústica fuera de la ley".

Asimismo, tras aseverar que "la calidad del aire es pésima", han puesto en entredicho los controles de las emisiones en la zona, que son "absolutamente insuficientes". Al respecto, han agregado que "las llamadas de los vecinos al centro de coordinación de emergencias se multiplican y las medidas de la Consejería de Medio Ambiente brillan por su ausencia".

Por ello, Verdemar-Ecologistas en Acción ha puesto estos hechos en conocimiento de la Consejería para que "tome cartas en el asunto" y "ponga freno" a una situación que es "una auténtica bomba para la población".