El conselleiro de Facenda, Valeriano Martínez, ha anunciado este sábado que la Xunta convocará nuevas oposiciones para cubrir 33 plazas reservadas a personas con discapacidad intelectual. En concreto, 16 corresponden al ámbito de la Administración general (12 de ordenanza y cuatro de auxiliar), y las 17 restantes serán para el Servizo Galego de Saúde (Sergas) -concretamente, todas plazas de celador-.

El conselleiro de Facenda ha acudido este sábado por la mañana al Palacio de Congresos y Exposiciones de Santiago, en donde se han desarrollado las primeras oposiciones de la historia de la Xunta reservadas únicamente a personas con discapacidad intelectual.

En cuanto a las nuevas 33 plazas, ha explicado que las 16 de la Administración general se convocarán en cuanto acaben las oposiciones actualmente en marcha. En cuanto a las 17 del Sergas, la previsión de la convocatoria es en este primer semestre del año.

"Estamos convencidos de que tenemos que facilitar la inserción de las personas con discapacidad intelectual", ha subrayado, para luego hacer hincapié en que las oposiciones que se han celebrado este sábado son "un acto de normalidad".

El conselleiro ha destacado, igualmente, el operativo puesto en marcha por la Xunta este sábado para que estas oposiciones transcurran con normalidad. Así, ha informado de que son 75 las personas que participan, incluidos psicólogos, enfermeros, cuidadores y personal especializado. Asimismo, estaba presente una ambulancia medicalizada con personal médico especializado.

352 PARTICIPANTES

Una vez superado el examen de este sábado, en el que hubo 352 participantes -el 82 por ciento de los convocados-, toca realizar la prueba en gallego, que será después de Semana Santa. A continuación, será la fase de concurso, en la que se valorarán los méritos de los participantes.

La previsión es que las seis personas que obtengan la mejor puntuación en esta oposición pasen a ser personal fijo de la Xunta este mismo año.

Valeriano Martínez ha recordado que el proceso que ahora está en marcha comenzó con la firma de un convenio con Down Galicia y Fademga para poner en marcha estas oposiciones, que fueron convocadas por primera vez en 2016.

"SENSACIONES MUY BUENAS"

Por su parte, Manuel Carrillo, formador y preparador laboral de Fademga, ha explicado a los medios que los opositores llegaron "un poco nerviosos", pero que salieron contentos y con "sensaciones muy buenas" del examen.

"Se lleva muchos años peleando con las administraciones para que cumplieran el cupo de reservas de plazas", ha explicado Manuel Carrillo, justo antes de indicar que existe una ley de 2010 que obliga a reservar el 2 por ciento de plazas de la Administración pública para personas con discapacidad intelectual.

En lo que respecta a la empresa privada, ha precisado que "uno de los grandes problemas" es "el desconocimiento de que este colectivo es tan capaz como otras personas para desempeñar determinados puestos de trabajo".

LA "AUTONOMÍA" DE TENER UN TRABAJO

A continuación, ha hecho hincapié en que el hecho de tener trabajo ofrece a estas personas "autonomía": "Quieren participar activamente en la sociedad y tener un sueldo digno".

Por su parte, la gerente de Down Galicia, Sonia Caldas, ve estas oposiciones "muy positivamente": "Eran necesarias y el proceso salió perfecto: las personas están contentas", ha explicado.

Asimismo, ha subrayado que participar en estas oposiciones es una "oportunidad muy importante", no sólo por el hecho de "sacar plaza o no" -sólo hay seis plazas, aunque habrá más convocatorias-, sino por "todo lo que hay detrás". "La preparación, las relaciones con el resto de compañeros y el hecho de tener ilusión promueven la autonomía".

Acto seguido, ha admitido que "siempre hay miedos del empresario o de los compañeros de trabajo". Sin embargo, ha asegurado que una vez se produce la incorporación de la persona y se hacen las adaptaciones adecuadas, los compañeros de trabajo "tienen claro" que son "capaces" de desarrollar "ciertos trabajos", aunque "puntualmente necesiten apoyos".