La selección española de fútbol no pudo superar a la rusa en el partido del mundial de fútbol que las enfrentó este domingo en Moscú. Decir que la derrota del combinado nacional supuso una decepción para mucha gente no es una exageración si se atiende a las cifras de audiencia.

El partido llegó a alcanzar el 72,4% de cuota de pantalla y sumó una media de 12.790.000 espectadores. Un dato que aún daba de sí, pues llegada la prórroga se registró un 76,3% de cuota y 13.835.000 espectadores pegados a la pantalla esperando el gol de España que le diera el pase a 'la roja'.

Pero eso no es todo. Llegados a los penaltis ya estaba viendo a la selección española el 81,1% de la audiencia, lo que se tradujo en 14.829.000 espectadores, ocho de cada diez personas que veían la televisión en ese momento en nuestro país.

Y aunque despertó un interés manifiesto, el agónico partido no logró superar a otras citas de la selección, quedando en una honrosa quinta posición de las emisiones más vistas de la historia, por detrás de citas como los penalties entre España y Portugal en la Eurocopa de 2012 (18 millones de espectadores) o la prórroga de ese mismo partido, así como por detrás del partido entre España e Italia en esa misma competición.