Pronto podremos referirnos a celebrity y empresaria Kim Kardashian también como abogada. La segunda hermana del clan Kardashian ha confesado que pronto será una defensora de la justicia.

Lo ha dicho en una entrevista concedida a Vogue, revista cuyo último número lleva a la futura abogada en portada. En sus páginas ha explicado que lleva desde el pasado verano trabajando como becaria en un bufete de abogados de San Francisco, donde pasará los próximos cuatro años formándose para en 2022 presentarse al examen y obtener la titulación.

La legislación de California permite a sus ciudadanos convertirse en abogados sin pasar por la universidad si realizan unas prácticas como las que está haciendo Kim y aprueban el posterior examen, tal y como tiene la celebrity planeado.

"Tuve que pensarlo mucho", explicó Kim, que además cuenta por qué finalmente optó por dar el paso hacia la abogacía. Al parecer, su involucación en el indulto para liberar a Alice Marie Jonhson fue crucial. Esta mujer fue condenada a cadena perpetua por tráfico de drogas, llevaba 20 años en la cárcel y la mismísima Casa Blanca llamó a Kardashian para pedirla consejo para cambiar el sistema de clemencia.

"Me senté en la sala Roosevelt con un juez que había sentenciado criminales y más gente poderosa y pensé 'Necesito saber más'", explicó a la revista.

Aunque esta decisión ha pillado por sorpresa a los seguidores de Kim, en realidad no es nada nuevo si se piensa en su padre. Robert Kardashian fue abogado y participó en la defensa de O. J. Simpson, uno de los juicios más mediáticos del siglo. "Mi padre tenía una biblioteca y cuando pulsaba un botón había una habitación secreta detrás del armario. Ahí estaban todos los libros de evidencias de O. J. Los fines de semana me colaba a husmear. Sentía mucha curiosidad".