Corea del Sur es uno de los países más tecnológicos del mundo y allí parece que hasta la fotografía se ha quedado anticuada. Ahora lo que se lleva es fotografiarse para obtener tu propio muñeco en tres dimensiones. La gerente del estudio, Yoo Keun, apunta a la rapidez en la impresión el éxito del negocio. Porque antes el proceso de fabricación llevaba de dos a cuatro semanas. Ellos han conseguido reducirlo y tienen listas de entre uno y dos días, lo que permite a los turistas hacerse con una y llevársela de vuelta a casa. Hay clientes que a quien fotografían es a sus mascotas. La impresión se realiza en una planta en el suroeste de Seúl, donde una máquina construye figuras que van desde los 5cm hasta los 30cm. Hechas con más de 1.000 capas de polvo de yeso se han convertido en un negocio redondo. Porque el precio oscila entre los 89 euros de la más barata hasta los 287 de las más cara.