El machismo en la vestimenta femenina laboral

Algunas mujeres han sido despedidas por no ponerse tacones o maquillaje. Es lo que le ocurrió a una guía de patrimonio nacional que se rebeló contra el uniforme, que incluía tacones. La sentencia del Tribunal Superior de justicia de Madrid anuló la sanción impuesta a la trabajadora, porque resultaba discriminatoria. Polémico fue también el despido de una dependienta que se negó a ir maquillada al trabajo. La justicia reconoció sus derechos, y fue indemnizada. Y más sentencias ganadas, las de las enfermeras y ATS de varios hospitales andaluces a las que la empresa les imponía la falda.