Factores a tener en cuenta en tu vuelta de vacaciones en coche

Tras unas merecidas vacaciones, llega el momento de afrontar el viaje de vuelta en carretera. En el viaje de ida no nos olvidamos de revisar el coche, pero ¿está nuestro coche preparado para la vuelta? ¿Hemos valorado regresar algún día antes para evitar la operación salida o la operación retorno? ¿Conocemos rutas alternativas para evitar el atasco?

El último día de agosto el tráfico de las carreteras es muy intenso. Agosto es el mes por excelencia para las vacaciones de la mayoría de españoles, y aunque éstas cada vez se cogen de manera más escalonada, los días de finales de mes son los más complicados en cuanto a la circulación. Por este motivo conviene extremar las precauciones y organizar bien la vuelta de vacaciones en coche. ¿Cómo debemos actuar?

Primero dedica un rato de los últimos días de vacaciones a comprobar el estado del vehículo. Ten en cuenta que ha estado sometido a altas temperaturas, a mayor carga de lo habitual y ha recorrido muchos kilómetros. No vale con haberlo revisado en el viaje de ida, también tienes que hacerlo a la vuelta para garantizar un trayecto seguro. Asegúrate que las luces funcionan correctamente, los líquidos de aceite y agua están al nivel adecuado y que la presión y estado de los neumáticos son correctos.

Intenta regresar antes para evitar los días de mayor concentración de vehículos en las carreteras; sin duda, el viaje será más cómodo y seguro. Conviene organizar el viaje con antelación para prever rutas alternativas o zonas de descanso y no olvides que el organizar bien el equipaje en el maletero reducirá el riesgo de que el vehículo pierda el control en caso de realizar una maniobra de emergencia o de lesiones evitables.

También ten en cuenta las horas en las que realizarás el viaje ya que, si lo haces al amanecer o al atardecer, las molestias en la visión y los riesgos de accidente son mayores. ¿Por qué motivo? Porque en esas horas el sol se sitúa de manera frontal a nuestro vehículo y los rayos de sol actúan de manera directa en el parabrisas pudiendo provocar deslumbramiento. La posición del sol varía en función de la estación del año, por ejemplo, en verano las horas peores serían entre las 6,30h y 9h de la mañana y entre las 17,30h y las 21h. Si es inevitable conducir en esas horas, utiliza gafas de sol polarizadas y homologadas para protegerte del sol.

Mentalmente es muy importante no ponerte hora de llegada ya que de este modo realizarás una conducción más relajada. También es importante conducir descansado, no realizar una comida copiosa y realizar paradas cada dos horas de viaje para hidratarse y estirar las piernas. No está de más recordar que el consumo de alcohol y/o drogas es incompatible con la conducción, al igual que lo es utilizar el teléfono móvil. Y todos con el cinturón de seguridad durante todo el trayecto, y el equipaje bien sujeto.

En caso de atasco, frena con suavidad, avisa al resto de pasajeros de que te aproximas a una retención y observa una posible salida de escape por si fuera necesario evitar una colisión por alcance por el conductor que viaja detrás de ti. En sobre todo en estos casos cuando llevar una adecuada distancia de seguridad se convierte en vital.

Ya queda poco para llegar a casa, ¡no bajes la guardia en los últimos kilómetros! Estamos cansados, nos encontraremos mucho tráfico, tenemos ganas de llegar ya, posiblemente con el atardecer, y nos adentramos en carreteras ya conocidas que nos pueden llevar a distraernos. Feliz regreso.