Trinidad Jiménez: "La solución a la crisis con Venezuela está en marcha"

Se ha vuelto tan diplomática que asusta. Trinidad Jiménez diferencia entre el Hugo Chávez que aparece ante las cámaras y el de las reuniones privadas. La última que mantuvo con él fue previa a la cumbre de Chile. "Estuvo muy cordial. Al acabar llegó Naomi Campbell, que iba a verle como embajadora de la Fundación Nelson Mandela. Me hizo gracia su: ‘how are you, Naomi?’".

BIO Nació el 4 de junio de 1962 en Málaga. Licenciada en Derecho. Ha sido vicepresidenta del Partido de los Socialistas Europeos. Es secretaria de Relaciones Internacionales del PSOE.

Ha pedido calma y sangre fría para resolver el incidente con Venezuela. Quien no tuvo mucha sangre fría fue el Rey…

El Rey, lo que hizo fue defender al presidente Zapatero y a España. Y ante las interrupciones permanentes del presidente Chávez era una manera de decirle ‘déjale hablar’. Hizo lo correcto.

En su opinión, no perdió los nervios.

No.

¿No se debieron haber invertido los papeles entre Zapatero y el Rey para que la actitud más moderada la hubiera tenido el jefe del Estado?

En las cumbres iberoamericanas es el presidente del Gobierno el que fija la posición de España. El Rey hace una introducción y le cede la palabra enseguida al presidente del Gobierno. Y cuando se estaban lanzando determinadas acusaciones contra Aznar y se estaban haciendo afirmaciones ofensivas sobre España y sus empresas, quien tenía que contestar era Zapatero, y eso fue lo que hizo.

¿La insistencia de Chávez en los ataques a España puede hacer que el Gobierno se replantee la llamada a consultas del embajador?

El Gobierno sigue esperando que este incidente se pueda resolver con los usos diplomáticos y con la posición que hemos defendido hasta ahora. Es evidente que si Chávez persistiera en su actitud y sus declaraciones resultaran ofensivas para el Rey y para nuestras instituciones, como ya hizo Zapatero en su momento al dar una respuesta adecuada a unas intervenciones inadecuadas, el presidente volvería a hacer lo mismo.

En definitiva, que si Chávez persiste en sus críticas, el embajador se vuelve…

No. Estoy diciendo que el presidente Zapatero dará una respuesta adecuada si hubiera otra declaración inadecuada.

Habrá entonces una respuesta verbal de Zapatero…

Lo que hizo el Rey fue defender al presidente Zapatero y a España. Lo correcto

La respuesta la tiene que dar el presidente y nos la plantearemos en su momento. No hay por qué adelantar ningún tipo de acontecimiento. Hemos hecho una apuesta, que creemos que es la más adecuada para defender los intereses de España, que es la de tratar de rebajar la tensión y parar esta escalada verbal.

¿Las relaciones se recuperan con silencio?

No. Haciendo respetar las instituciones españolas, a las empresas y a nuestros residentes en Venezuela, pero sin caer en provocaciones. Una escalada verbal no conduce a nada. Lo que hace el Gobierno español es utilizar la diplomacia para resolver un incidente diplomático.

¿El PP defendería al Rey peor que el PSOE?

Sólo tengo claro cómo defiende el PSOE al Rey: con el máximo respeto y responsabilidad.

¿Ha vuelto a hablar privadamente Zapatero con Chávez?

Quien ha hablado es el ministro Moratinos con su homólogo Nicolás Maduro. Han conversado los cancilleres, que son los que tienen que resolver el asunto.

¿La solución está en marcha?

Sí.

¿En Iberoamérica tenemos aliados o amistades peligrosas, como advierte el PP?

Del papel que jugó el Gobierno de Aznar en el golpe de Estado contra Chávez no quiero hablar

Aliados, amigos, países con los que tenemos vínculos muy sólidos y una enorme densidad de relaciones e intereses. A pesar de las diferencias que podamos tener en algunos momentos, sólo puedo pensar en América Latina como países hermanos.

¿Qué papel jugó el Gobierno de Aznar en el golpe de Estado contra Chávez?

Éste es un asunto del que no quisiera hablar.

Pero jugó un papel…

No voy a entrar en ese debate. Es un asunto que se planteó ya hace más de tres años y en este momento no voy a discutir ese asunto.

El PP pide mano dura contra Chávez. ¿Opinan lo mismo las empresas con intereses en aquel país?

Yo no entiendo lo que quiere decir mano dura en la relación con otros países. Son los ciudadanos de estos países los que eligen a sus gobernantes y, por tanto, tenemos que mostrar un máximo respeto a esos gobernantes. Con algunos tenemos mayor afinidad y no otros menos, peo con todos tenemos una relación bilateral estrechísima.

Hay gobernantes a los que nadie ha elegido…

Bueno, pero en todo caso son Gobiernos con los que tenemos que establecer una relación y eso es lo que vamos a seguir manteniendo. Tenemos la obligación de defender también los intereses económicos, que no condicionan la actuación política pero forman parte de las consideraciones que el Gobierno de España se plantea cuando tiene que abordar una relación en su conjunto.

¿Una tensión prolongada con Venezuela puede dañar las relaciones con Nicaragua o Bolivia?

No lo creo. Después de conversar con dirigentes de todos los países, la conclusión que han sacado es que se ha tratado de un incidente aislado con un país determinado y que eso no va a repercutir en las relaciones con terceros.

¿Existen riesgos de que se desate una campaña contra el ‘imperialismo español'?

He seguido todo lo publicado en América Latina en los últimos días y lo que han reflejado los medios es un extraordinario apoyo a España, al Rey y al presidente Zapatero.

¿Ha conversado recientemente con Daniel Ortega o con alguno de sus colaboradores?

Zapatero dará otra respuesta adecuada si hubiera más declaraciones inadecuadas del presidente Chávez

Al salir de la reunión hablé con su viceministro, y con su embajador aquí en España. Les transmití el malestar que sentí al oír determinadas expresiones y acusaciones porque no se corresponden con el nivel de relaciones y de cooperación que mantenemos con Nicaragua.

¿Podría el Gobierno rebajar el volumen de la ayuda bilateral?

La cooperación española es incondicionada, y se dirige a mejorar la situación de los pueblos y el bienestar de la ciudadanía. El hecho de tener un desencuentro no va a provocar como respuesta la reducción de la cooperación.

Zaplana sugirió esta semana pasada que, llegado el caso, el Gobierno debía amenazar con cortar el grifo de la cooperación.

Afortunadamente Zaplana no hace política exterior. Un Gobierno responsable tiene claro que más allá de las diferencias la cooperación no puede cortarse por un incidente.

Como no hay mal que por bien no venga, el embajador de EE UU en España no ha dejado de aplaudir, incluso a Zapatero.

El embajador ha mantenido un trato extraordinariamente cordial con este Gobierno y ha trabajado intensamente para mejorar las relaciones. Me he visto con él de manera habitual y hemos conversado por teléfono en muchas ocasiones.

A la crisis con Marruecos, que parece en vías de solución, se ha sumado ésta con Venezuela. ¿No son demasiados frentes abiertos para nuestra diplomacia?

El mundo es muy grande. Lo de Venezuela, repito, es un hecho aislado. España tiene relaciones muy intensas con toda el África subsahariana, con Oriente Medio, con el Mediterráneo, con Asia, con la UE… Aunque se haya dado algún tipo de incidente, con posibilidades además de ser resuelto de manera inmediata, el balance es muy positivo.

Curiosamente, con el Rey como protagonista en ambos casos…

No. Pongamos las cosas claras. En el incidente con Marruecos, España no ha participado ni ha tenido parte. El Rey fue a visitar a dos comunidades autónomas españolas. Que Marruecos tiene una posición de reivindicación de las mismas es una cuestión de Marruecos, pero para España no hay ningún tipo de discusión sobre el particular. La visita a Ceuta y Melilla no convierte al Rey en protagonista de ningún incidente. Es el jefe del Estado y, por tanto, puede viajar a dichas comunidades con normalidad.

¿Ha consultado éstos asuntos con Felipe González? No he consultado con él. Me preguntaron que si a Felipe González le había parecido blanda la actitud de Zapatero y, como sí hemos hablado, dije que no le había parecido blanda.

Queda descartado, en consecuencia, que Felipe González ejerza de asesor de Exteriores.

Felipe González es embajador extraordinario y plenipotenciario para la conmemoración de los bicentenarios de la independencia. Y en ese sentido, forma parte de la estructura de la Presidencia del Gobierno y del Ministerio de Asuntos Exteriores.

EN DOS PALABRAS: "Odio en olor a marisco"

¿Café solo, cortado o con leche? Con leche.

¿Qué hace si se desvela? Leer un libro.

¿Se muerde las uñas? No.

¿Se sonroja si la halagan? Sí.

¿Qué olor le parece más insoportable? El del marisco recién cocido. Lo odio.

¿Pasaría por el quirófano por estética? Si me veo en la necesidad, ¿por qué no?

¿Cambia mucho de peluquero? No, soy bastante fiel a mi peluquera.

¿Qué libros tiene en la mesilla? El de Santiago Rocangliolo sobre Sendero Luminoso.

Tres profesiones que le hubiera gustado ejercer: Escritora, cocinera y funcionaria.

SIN RESPIRAR: "Lo quiero controlar todo"

Adora: Pasear por la playa. Detesta: La deslealtad. Teme: Perder la pasión. Aspira: A ser feliz. Colecciona: Novelas de autores latinoamericanos. Una manía: La puntualidad. Un defecto: Quiero controlarlo todo. Una virtud: No perder la calma en los momentos difíciles.

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