Las procesiones que cruzarán la ciudad esta semana han obligado al Ayuntamiento a tomar medidas especiales para que los pasos circulen, especialmente en varias calles del casco antiguo y alrededores del Ayuntamiento.

Así, el Consistorio se ha visto obligado a serrar los bolardos en las inmediaciones de Alfonso el Sabio y también en otras vías como Montegón o Pórtico de Ansaldo (junto al convento de las Hermanas de la Sangre), entre otras.

Los primeros bolardos se eliminaron, según fuentes municipales, porque algunas cofradías querían evitar las obras de Alfonso el Sabio y, para circular por otras calles, solicitaron cortar estos postes por falta de espacio.

Según el concejal de Fiestas, Andrés Llorens, han tenido que tomar esta medida «para dejar paso a las procesiones, pues son elementos fijos y la única solución es retirarlos». Pero será provisional: «Inmediatamente después de las fiestas los repondremos», asegura el edil.

Estos elementos ya dieron que hablar, como publicó 20 minutos. En el casco antiguo los vecinos adivinaron cómo sortear la traba de los anteriores bolardos, que eran desmontables. Algunos adquirieron, en un centro comercial, una llave maestra con la que conseguían retirarlos. Eso obligó al Ayuntamiento a colocar otros obstáculos de acero más resistentes que, ahora, han tenido que serrar.

En cuanto a los cortes de tráfico, las hermandades y cofradías del Santísimo Cristo del Mar, Stabat Mater, Nuestro padre Jesús y el Santísimo Ecce Homo cierran hoy las calles del recorrido oficial (avda. Constitución, Duque de Zaragoza y la Rambla) y otras.

No se puede pasar por Villavieja, Pintor Sorolla, Tomás López Torregrosa, Alfonso el Sabio, plaza de la Muntanyeta, Ángel Lozano, Teatro, Altamira, pza. del Ayuntamiento, Poeta Carmelo Calvo, García Morato, Teniente Coronel Chápuli y Gerona.

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Paso bloqueado a ambulancias

Según el presidente de la Asociación de vecinos del Casco Antiguo, Juan Olmo, la calle del Carmen y sus inmediaciones llevan en muy mal estado casi un año y «sólo se han preocupado para las procesiones». Así, los restos de un incendio en esta misma calle que hubo hace tres semanas todavía no se han retirado y el tránsito resulta imposible. «No se puede pasar en coche ni por esta calle ni por Toledo, y no podría pasar ni siquiera una ambulancia; además, la calle San Roque está sin limpiar; esto es de vergüenza», se queja Olmo.