Según ha informado la Policía Nacional en una nota de prensa, efectivos de la Unidad de Prevención y Reacción, encargados de mantener discretos controles de vigilancia en los alrededores de centros educativos, sorprendieron en las proximidades de un quiosco de chucherías a dos personas que se encontraban en el interior de un vehículo y que, al observar la presencia policial, intentaron ocultar sus rostros.

Así, han indicado que "mientras se producía la identificación, uno de ellos, que resultó ser el propietario del negocio, hizo indicaciones a una chica que se hallaba en el interior del puesto de chucherías para que ésta guardara algo que no quería que fuera identificado por los agentes".

Ante las sospechas de que pudieran ocultar algo en el interior del quiosco, se registró el mismo, hallando 224 gramos de hachís, 82 cajetillas de tabaco de contrabando, 1.370 euros, dos teléfonos móviles y un reloj marca Lotus que, tras las indagaciones efectuadas, había sido sustraído en la localidad madrileña de Coslada hace tres años.

Ante la constatación de los efectos intervenidos, se detuvo al propietario y a la joven, instruyéndose las oportunas diligencias, pasando posteriormente a disposición del Juzgado de Guardia.