También es metódica: «Hago resúmenes y esquemas y lleno la mesa de rotuladores de colores. El silencio es fundamental». Ha tenido que buscar la tranquilidad en otra parte porque su casa está en obras y su cuarto es el centro de las reformas: «No tengo habitación y me cuesta estudiar. Estuve en casa de mi abuela un tiempo y ahora en el cuarto de mi hermana, pero me he acostumbrado a estudiar siempre en el mismo lugar y en las bibliotecas no me concentro».

No es supersticiosa, confía en «la suerte con las preguntas y en que los profesores no vayan a pillar». No se pone nerviosa si se lo sabe: «Prefiero no ir si no he estudiado». De momento le queda aprender a concentrarse en cualquier situación: «Los exámenes terminan el día 16; las obras..., no tengo ni idea», dice con un suspiro.

Madrid me gusta por...

... el centro y el barrio de la Latina por la noche.

y me disgusta por...

... pierdes mucho tiempo en ir de un sitio a otro.

admiro a...

... la gente que hace algo nuevo y demuestra creatividad e iniciativa.

me caen mal...

... los pedantes. Los hay entre profesores y alumnos.