Según detalla el Ayuntamiento isleño en una nota, tras el primer aviso la respuesta de los técnicos municipales ha sido "inmediata" y se han personado en la playa para tomar muestras de agua en estos accesos. Concretamente, se han tomado tres muestras de agua que serán sometidas a análisis de laboratorio.

Así, una de las muestras se ha hecho llegar a la depuradora para determinar si hay presencia de amoníaco, sustancia presente en las aguas fecales. Las otras dos se han enviado a laboratorios situados en Alicante para que sean sometidas a análisis microbiológocos más profundos. Se esperan que los resultados del análisis de la depuradora estén disponibles a lo largo de este mismo lunes.

El Ayuntamiento ha aclarado que la prohibición del baño en esta zona es una medida de precaución y salubridad y que, en cualquier caso, lo normal es que esta masa de agua se diluya en el mar durante esta jornada hasta desparecer.