La moda de regalar una mascota a los más pequeños de la familia en Navidad es un poco más difícil en Vilagarcía de Arousa, ya que el Refugio de Animales de la ciudad se ha propuesto no entregar ninguna mascota durante estas fechas.

Así, la encargada del cuidado de los perros del refugio, María Recio, comentó a los medios de comunicación que, a pesar de que cada vez "la gente se va concienciando de que un perro no es un juguete", todavía hay personas, que el mismo día de Reyes, acuden al Refugio de Animales para recoger un perro y hacer de él un regalo de Navidad para el "peque" de la familia.

No son juguetes para niños

La Protectora no hace contratos de adopción a las personas que acuden al Refugio buscando una mascota como regalo de Reyes desde hace ya un tiempo. No en vano, Recio afirma que antes de que nadie se lleve a alguno de los perros "elaboramos un cuestionario exhaustivo al adoptante".

Una de las condiciones para un perro que va a "dormir" al aire libre es no atarlo con una cadena de menos de seis metros, ya que según la cuidadora, "todavía hay gente, sobre todo personas mayores, que sigue pensando que un perro tiene que servir para algo, como para guardar la casa".

Los jóvenes los cuidan más

Por este motivo, la Protectora hace más contratos de adopción a gente joven, unos cuarenta al año, porque, normalmente, es el colectivo que cumple los requisitos del contrato, como poner las vacunas al animal, el microchip, etc.

Para cerciorarse de que los perros van a vivir dignamente en su nueva casa, María Recio acude personalmente, y con asiduidad, a los domicilios de los animales para comprobar su estado y sus condiciones de vida. En opinión de la cuidadora del Refugio, la cría de perros debería estar regulada. "De este modo se acabaría el problema de toda esta cantidad de perros que hay en los refugios y en las perreras", añade.

"Yo aquí tengo más del doble de animales de los que debería tener", pero "¿Qué voy a hacer? Tanto Protección Civil como particulares me traen animales abandonados y los tengo que coger, no los voy a devolver a la calle", se lamentaba María.

Para no promover la cría entre los perros, el Refugio entrega todos los animales adultos castrados, "aunque la mayor parte de las personas buscan un cachorro, macho y de raza, normalmente un pastor alemán", indicaba la cuidadora. En las protectoras de animales (Galicia cuenta con 14), o por lo menos en la de Vilagarcía, solamente se sacrifica a los perros que son muy agresivos o que tienen una enfermedad terminal, todos ellos mediante una inyección letal.

Una muerte digna

Luego son incinerados. "Dormimos a los perros y así no sufren, tienen una muerte digna", explicaba María Recio, quien añadió que " en las perreras se mata a los animales veinte días después de su ingreso si nadie los adopta, y los sacrifican con relajantes musculares".

"Las mascotas sufren muchísimo, tardan 20 o 30 minutos en morirse", explicaba Recio.En este sentido, el Concello de Vilagarcía propuso a la Protectora que sacrificase a los perros de edad avanzada, propuesta a la que el Refugio se negó tajantemente.

En cuanto a la financiación de la Protectora, su mayor fuente de ingreso es el Concello, que le entrega entrega 12.000 euros al año repartidos en dos pagas, para sufragar los gastos de los perros y de las instalaciones.

Los socios, unos 180, también contribuyen económicamente para que el refugio pueda funcionar, e incluso particulares acuden al refugio con pienso, camas u otros objetos para los animales que allí viven. Sin duda, la mejor forma de contribuir al Refugio de Vilagarcía es concienciarse de que un perro no es un juguete para regalar en Navidad.

Recio considera que "un perro no es un objeto, por lo que no se puede abandonar, la gente tiene que concienciarse de todo esto".

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