El presidente del Partido Popular en Barcelona, Alberto Fernández Díaz, reclamó ayer al equipo de gobierno que dé certificados de «buena conducta» a los inmigrantes que aspiren a renovar u obtener permisos de trabajo o residencia.El alcalde, Jordi Hereu, consideró «peligrosa» la propuesta de Fernández Díaz porque se establecen «diferencias en función de orígenes, colores y etnias». La respuesta de las entidades inmigrantes tampoco se hizo esperar. Pidieron certificados de «buen político».
Por otra parte, el PP de L’Hospitalet ha repartido estos días por las casas un documento donde se afirma que se quiere acabar con las concentraciones de inmigrantes que hay en la ciudad. El portavoz del grupo, Juan Carlos del Río, pidió el voto para conseguirlo. Los socialistas han calificado esta propaganda de «xenófoba».
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