El príncipe Felipe ha respaldado este jueves las inversiones de empresas españolas en México en un encuentro con los responsables de las grandes compañías del país, donde también ha animado a los inversores mexicanos a invertir en su país.Al encuentro con el príncipe en la residencia del embajador español han asistido las principales empresas españolas con negocio en el país, algunas líderes en sus respectivos sectores: Telefónica, BBVA-Bancomer, Banco Santander, OHL, ACS, Iberdrola, Gas Natural-Fenosa, Repsol, Acciona, Mapfre, Inditex, Grupo EmpresarialÁngeles, Grupo Gigante y Grupo Mar.Mientras España sigue sumida en la recesión, la economía mexicana continúa en expansión y, según han destacado fuentes diplomáticas, el Gobierno de Peña Nieto ha avanzado ya algunos proyectos interesantes para las empresas nacionales.Se espera, por ejemplo, un cambio en la regulación energética que abrirá Petróleos Mexicanos (Pemex) a la inversión extranjera, reforma que podría ofrecer importantes oportunidades para compañías como Repsol.Pero el Gobierno busca también que la inversión mexicana ponga sus ojos en España, como hizo Pemex el mes pasado al cerrar contratos por valor de 300 millones de euros para la construcción de dos buques hotel en los astilleros de las rías de Ferrol y de Vigo.El presidente electo visitó Madrid a mediados de octubre y ofreció a España el apoyo y la ayuda de su futuro Gobierno para salir de la crisis económica.

Motivación para invertir en España

En declaraciones a los periodistas antes del almuerzo, el presidente del Consejo Empresarial hispano-mexicano, Valentín Díez Morodo, ha apostado por "invitar y motivar" a los empresarios mexicanos para que inviertan en España."Nos entendemos de inmediato y es el momento de que ambos nos complementemos", ha recalcado Díez Morodo consciente de las dificultades que atraviesa ahora España y de la "sólida y sana" base macroeconómica de la que disfruta México, con más de 120 millones de habitantes.El príncipe ha querido mostrar a los empresarios el respaldo a su trabajo en el exterior en un momento en el que el mercado español se encuentra cerrado, un apoyo que el consejero delegado de Telefónica México, Juan Antonio Abellán, ha calificado de "importantísimo" en un momento en que el nuevo gobierno mexicano va a dar sus primeros pasos.Telefónica, con 21 millones de clientes en México y una cuota de mercado de cerca del 22%, aspira a una mayor apertura en regulación en telecomunicaciones en esta legislatura para luchar contra el gran monopolio de Carlos Slim, ha explicado Abellán. En la misma línea, el presidente de OHL México, José Andrés de Oteiza, también ha puesto sus esperanzas en el nuevo Gobierno de Peña Nieto y en sus promesa de impulsar el sector de las infraestructuras.Las grandes empresas españolas, ha reconocido De Oteiza, crean empleo en estos momentos en México, pero una de sus grandes funciones es subcontratar pequeñas y medias empresas, una vía por la que el crecimiento mexicano puede beneficiar a compañías españolas.La balanza comercial fue deficitaria para España el año pasado en 800 millones de euros por la importación de petróleo, pero España es el principal inversor europeo en México y el segundo a nivel mundial, tras Estados Unidos.Unas cifras que se traducen en el importante peso de algunas empresas: BBVA-Bancomar es, por ejemplo, el primer banco del país; el Santander se sitúa en segunda posición; y Gas Natural-Fenosa e Iberdrola producen en torno al 20% de la energía eléctrica del país.Tras el almuerzo, don Felipe, acompañado del secretario de Estado para Iberoamérica, Jesús Gracia, inauguró la sede de la Fundación Ortega y Gasset-Gregorio Marañón en la Universidad Autónoma del Estado de México, en la localidad de Toluca.Este viernes se reunirá con el presidente saliente, Felipe Calderón, y asistirá a la cena que ofrecerá a las personalidades mexicanas y extranjeras que se encuentran en el país para el traspaso de poderes, que tendrá lugar el sábado.Con este el príncipe de Asturias ha asistido a 63 actos de investidura desde que comenzó en 1996 en Guatemala, a representar a España en las tomas de posesión de los presidentes iberoamericanos.