Michael Fassbender, el nuevo sex symbol del celuloide y cotizado actor cuyo talento ha sido premiado en diferentes citas cinematográficas, no está nominado al Oscar al mejor actor protagonista por los prejuicios de la puritana sociedad estadounidense. Esto es lo que piensa, al menos, Steve McQueen, que dirigió al actor alemán en Shame, una cinta en la que Fassbender encarna a un adicto al sexo.

"En Estados Unidos tienen demasiado miedo del sexo, es por eso por lo que no está nominado", afirma rotundo McQueen. "Si repasamos la lista de nominados a mejor actor. ¿Michael Fassbender no está en ella? Es una especie de locura. Pero así son las cosas, es un premio estadounidense, dejémoselo para ellos", insiste el director en declaraciones recogidas por The Hollywood Reporter. Recordemos que Shame relata la historia de un adicto al sexo y que, evidentemente, incluye varias escenas subidas de tono así como uno de los desnudos masculinos de la temporada.

McQueen ya dirigió a Fassbender hace cuatro años en Hunger, otra cinta incómoda en la que relató la huelga de hambre de los presos del IRA en la prisión de Maze encabezada por Bobby Sands, y parece que su admiración por el trabajo del intérprete alemán no conoce límites. De hecho le califica como un actor "único en su generación".

Interrogado por una nueva colaboración con Fassbender, McQueen no la descartó aunque señaló que todo depende el de la historia que tengan entre manos. "La clave está en el guión, Michael es la persona adecuada para el personaje solo si le gusta el guión. Es lo que me gusta de nuestra relación, que no estamos atados, no somos un matrimonio. Es una amistad que está basada en el respeto del talento de cada uno y nuestro amor por el cine", sentenció.

Ya sea por los prejuicios de la sociedad estadounidense, ya sea por las simples preferencias de los académicos de Hollywood, lo cierto es que el próximo domingo por la noche quienes lucharán por hacerse con el Oscar al mejor actor protagonista serán Brad Pitt por Moneyball:Rompiendo las reglas; George Clooney por Los descendientes; Jean Dujardin por The Artist, Gary Oldman por El topo; y la gran sorpresa, Demián Bichir por A Better Life.

Michael Fassbender, al igual que Ryan Gosling, tendrá que conformarse con ver la gala que presentará Billy Crystal por la televisión. Así es Hollywood...