Sanabria, huellas glaciares en el norte de Zamora

Hace 100.000 años, los caprichos de la naturaleza comenzaron a dar forma a uno de los parajes de interior con más encanto de la península. Una gran masa de hielo situada en lo que es ahora el noroeste de la provincia de Zamora creó profundas depresiones y circos que, con los milenios, han surgido a la superficie en forma de cañones y lagos.

Aunque no es el único de la zona, el resultado más evidente de tantos años de erosión es el lago de Sanabria, que con una superficie de más de 300 hectáreas y una profundidad de 50 metros es considerado el más grande de origen glaciar de la península ibérica. Alrededor de este lugar se ha delimitado una zona que a día de hoy es uno de los principales referentes de turismo de naturaleza en Castilla y León.

El Parque Natural del Lago de Sanabria está situado en las estribaciones de la sierra de la Cabrera y Segundera. Las más de 22.000 hectáreas protegidas son el hogar de alrededor de 76 especies de aves y 17 de grandes mamíferos, de los que el lobo ibérico es el más representativo. Este lugar, declarado Sitio Natural de Interés Nacional en 1946 y Parque Natural en 1978, guarda también diferentes tipos de bosques, entre los que predominan los robledales.

Por sus características, este parque es un lugar frecuentado tanto por aficionados a la nieve en invierno, como por senderistas y ciclistas durante el resto del año. Algunos de los parajes que se pueden visitar en rutas de diferente dificultad son los circos glaciares de Trevinca y La Survia, el de la laguna de Lacillo, los embalses de Vega de Tera, Vega de Conde y Puente Porto, la cueva de San Martín, los Cañones de Cárdenas y Segundera, el valle de Forcadura, el pico Moncalvo y las lagunas de los Peces, Herbosas y la Clara.

Además, la dimensión del lago de Sanabria permite la navegación a vela. En el Centro de Interpretación del parque, situado en el monasterio medieval de San Martín de Castañeda, el visitante encontrará información sobre las actividades que se pueden realizar en este entorno.

Este año, el parque cuenta con un nuevo reclamo turístico. Desde hace unos meses, el lago de Sanabria se puede recorrer en el Helios Cousteau, el primer catamarán del mundo propulsado por energía eólica y solar. Con 19 metros de eslora y 8 de manga, este barco puede transportar a unos 100 pasajeros, que durante el trayecto escucharán información sobre el funcionamiento del vehículo.

Silencioso y no contaminante, este prototipo se desplaza a la velocidad marcada por el sol y el viento. Si lo hace exclusivamente con energía solar, puede variar entre los dos nudos de los días soleados y el nudo y medio de los nublados. Pero con el viento, la media alcanzada en los trayectos es de 5 nudos, que iguala a la del barco del parque de los Arribes del Duero, situado en la frontera entre Portugal y la comarca zamorana de Sayago, que tiene dos motores de 300 caballos.

El Helios Cousteau, que ha supuesto una inversión de alrededor de un millón de euros, servirá para hacer rutas a los visitantes por el lago y para apoyar a los equipos de investigación que trabajen en la zona.