Querida Espe, si me permites que te tutee a pesar de ser una sexagenaria y no consideras machista mi trato.

Siempre que pienso en ti, me viene a la cabeza esa genial viñeta de Manel Fontdevila en la que apareces impoluta inmersa en un barrizal que cubre a tus compañeros de partido, que te preguntan: "¿Cómo lo haces?". Esa túnica tan blanca empieza a peligrar con los escándalos que siempre te han rodeado y que últimamente te acechan sin piedad, y de los que creo que ya va siendo hora de que des alguna explicación. Púnica, la trama Gürtel, los escándalos de CajaMadrid, la gestapillo, el Canal de Isabel II... son ya algo más que las dos ranas que dices que te han salido. Es una auténtica cloaca.

Ahora me cuentan que no has querido responder a una periodista de La Sexta (tú la llamas "La Secta") sobre la relación de tu esposo, Fernando Ramírez de Haro, con la sociedad Savial, S. L. No respondes a preguntas de carácter machista, has dicho sin sonrojarte. Según ha desvelado Infolibre, esta empresa de tu marido ha recibido 4 millones de euros en subvenciones públicas, de los que ha dedicado 3 a comprar acciones de Bolsa. Mamandurrias lo llamabas tú, ¿no?

Cuando el marido de Manuela Carmena tuvo una situación crítica y complicada con su estudio de arquitectura, cargaste contra ella con todas tus naves, pero ahora te parece machista que te pidan explicaciones de lo tuyo.

Permíteme un consejo, Espe. Haz realidad el título de tu libro, Yo no me callo, y empieza a dar todas la explicaciones que nos debes, que son muchas.