Olivia Molina: "Es muy violento cuando te roban momentos de intimidad o fotos"

  • La actriz regresa al teatro en la adaptación de 'La caída de los dioses'.
  • Es una producción del Teatro Español que dirige Tomaz Pandur.
La actriz Olivia Molina.
La actriz Olivia Molina.
Jorge París
La actriz Olivia Molina.

Tras cuatro años de ausencia, Olivia Molina vuelve al teatro. Lo hace en la adaptación de la película de Lucchino Visconti La caída de los dioses, una producción del Teatro Español que dirige Tomaz Pandur y que este jueves se estrena en Valladolid. Ella interpreta a Elisabeth Thalmann.

¿Trabajar con Pandur es…?

Es duro porque de dónde parte es algo muy íntimo, profundo y personal de cada uno. Yo no estoy acostumbrada a trabajar a ese nivel, me daba mucho pudor y mucho miedo estar tan expuesta. Pero me he sentido arropada.

¿Cómo es esa sensación de vulnerabilidad cuando se mete uno en la piel de un personaje que se encuentra en una situación tan extrema como la de Elizabeth?

A mí me ha sobrepasado. Me ha despojado de todas las caretas tras las que me escondo. Me ha hecho partir de la pureza de mis emociones: como Olivia, como mujer, como actriz. Tienes derecho a sentir lo que sientes, a vivir un ataque de histeria, a desfigurarte, a sentirte libre en tu creación. Que alguien como Tomaz te dé un espacio para mostrar eso y te acompañe en ese pudor, para mí, por el momento, por la familia de la que vengo, es un regalo.

¿Ha tenido en cuenta la película al preparar su personaje?

Me inspiró Charlotte Rampling. No puede más que sumarme, es una maravillosa actriz, bella, etérea, luminosa. Pero no queríamos que fuera una copia, fue un punto de partida. Luego [vino] qué entiendo yo, mujer de esta generación, con mi historia.

¿Por qué una actriz versátil, pudiendo hace cine o televisión, donde se mueve el dinero, se queda con el teatro?

Porque, quiero creer, no todo lo mueve el dinero; y porque te pone en lugares que para un actor son como aire fresco. El teatro te da tablas de actriz real, no del truco. La verdad que tiene el teatro es incomparable: para mí, que suceda en comunión con el público es magia, es lo más gratificante que puedas vivir y también lo más terrorífico: es de locos y es de valientes.

Aunque suponga hacer un esfuerzo por compaginarlo con el rodaje de la serie…

Es intenso y complicado, pero es una suerte poder estar trabajando. Yo me lo puedo permitir, tengo fuerza, energía y juventud como para llevarlo a cabo y estoy viviendo día a día. Las idas y venidas son una locura, pero creo que uno se puede organizar y estar muy concentrado en cada momento. Se puede hacer, no soy la única ni la primera.

¿Es una suerte que hasta ahora no haya parado?

Sí. La suerte, al final, es preparación y oportunidad, es estar dispuesta a coger las cosas que te vienen y a luchar por ellas. Me siento una privilegiada: vivo de mi trabajo, crezco y maduro con él. Soy consciente del lugar en el que estoy, no tengo ambiciones muy elevadas. El paso a paso es lo que me está pareciendo un regalo de la vida.

No tiene ambiciones, pero si le dedica tanto tiempo será porque ocupa un lugar importante en su vida.

Absolutamente. Esto es una manera de vivir más que un trabajo. Implica todo: tu manera de ver, de interpretar las cosas, de relacionarte, de exigir, de pensar, de percibir… Voy creciendo como mujer, y va paralelo a crecer como actriz. Me siento afortunada de sentir vocación. Con el miedo que da, porque una pasión tiene su lado complicado, y con la inestabilidad, no es fácil; pero cuando compensa, vale por todo.

¿Y para desconectar qué busca?

Soledad. Y, a la vez, estar acompañada de personas que te bajen a la realidad, a lo importante (que es tu familia, tus amigos elegidos…), Es importante no perder el norte. Luego, viajar para mí es expansivo: ver otras maneras, otros porqués, me sitúa en mi lugar.

No sé si con su familia le resultará muy fácil desconectar teniendo en cuenta a qué se dedican…

Sí, es muchas veces de lo que se habla, es nuestro día a día, no tiene nada de excepcional. Cuando creces, lo vives como algo natural. Tiene su lado bueno y su lado complicado.

¿Se habla mucho de lo que está haciendo cada uno?

Sí, pero como conversaciones de familia y entre muchos otros temas; no somos de darnos grandes consejos. Obviamente, soy hija de una gran actriz, pero soy hija. Como madre, como compañera, como mujer… en muchos aspectos aprendo de ella, observo, me sitúo, veo nuestras diferencias; pero desde el amor y la confianza, desde lo pequeñito, desde la rutina: es mi madre.

Supongo que también se tiene que sentir uno más comprendido…

Absolutamente. Ella me comprende y me apoya, y yo a la vez a ella. Qué complicado es ver una mujer con su familia, su oficio, ¡tiene cinco hijos! Lo aprecio, me enorgullezco, veo la dificultad y el sacrificio que implica. También como hija hay cosas complicadas al tener una madre actriz: las ausencias, los momentos difíciles que le implica un proceso creativo, lo que te implica a ti como hija… Pero son nuestras circunstancias, y me siento afortunada también [por eso].

¿Qué hay de cierto en la imagen del artista bohemio?

Creo que hay tantas maneras como artistas. Pero [ser artista] implica rigor, disciplina, responsabilidad… Hay una imagen que dar, vivimos de ella y es lo que reciben los otros; pero no todo es frívolo. De puertas para dentro hay un orden y una implicación personal bestial. Es importante no perdernos nosotros mismos en cosas más frívolas, pero una cosa no quita la otra.

Usted ha conseguido dejar su vida privada bastante al margen…

Bueno, se intenta. Hay algo ahí también complicado. Para mí es mi tesoro, mi derecho, proteger eso. Es muy violento cuando te roban momentos de intimidad o fotos; es una sensación de traición que te asusta. Tienes que lidiar con eso, y con la madurez vas entendiendo el límite de qué decir. Para mí también es complicado porque hablar de ese mundo es hablar de mi familia también. Pero vas aprendiendo. A veces la cagas y otras pecas de menos. Supongo que es cuestión de ir viendo.

¿Qué porcentaje de talento hay en usted como actriz?

No lo sé, no tengo ni idea, pero creo que el esfuerzo y el trabajo te llevan adonde tú quieras. Como decía Picasso, que la inspiración me pille trabajando. Mi actriz yo me la voy currando y en eso llega el momento creativo.

¿Un deseo?

Ser capaz de crear cada vez con más libertad, es lo que me va llevando. Crecer como actriz es muy gratificante, es lo que me hace feliz en este momento.

Mostrar comentarios

Códigos Descuento