Cunde el ejemplo

Según se fue conociendo a lo largo del día esta singular convocatoria, jóvenes de ciudades como Albacete, Almería, Ávila, Badajoz, Cáceres, Huelva, Salamanca, Santiago de Compostela, Toledo, Valladolid o Zaragoza organizaron citas similares en fechas próximas.

Ante la expectación creada entre los jóvenes en torno a este asunto, el delegado del Gobierno en Andalucía, Juan José López Garzón, pidió ayer moderación. El representante de la administración central hizo un llamamiento a los jóvenes para que actúen «con moderación, siguiendo el camino de compatibilizar su ocio con el derecho del resto de la ciudadanía al descanso y al respeto al mobiliario público».

Investigar los correos

Respecto a la propuesta de la Confederación de Asociaciones de Vecinos de Andalucía (CAVA), para que se investigue el origen de las convocatorias a través del correo electrónico, López Garzón, recordó que habría que estudiarla «con todo rigor» desde el punto de vista legal.

Mientras tanto, responsables municipales de varias de las ciudades afectadas anunciaban medidas para impedir la celebración de estas orgías etílicas.

Toledo, en casa del alcalde

La convocatoria del macrobotellón en Toledo se ha hecho para el próximo sábado, ni más ni menos, que en un parque del barrio residencial donde vive el alcalde de la capital castellano-manchega, José Manuel Molina.

Lugo, frente al vándalo

El Ayuntamiento de Lugo anunció el lunes la creación de una unidad antivandálica en la Policía Local, para hacer frente a los actos incívicos que se repiten cada fin de semana   en las zonas de movida nocturna y botellón de la ciudad gallega.

Multa de 300 euros a quien beba en la calle

Cuatro años después de que la Comunidad de Madrid aprobara su ley seca (que multa con 300 € al que tome bebidas espirituosas en plena calle, a no ser que sea en un establecimiento autorizado), miles de madrileños planean incumplir la ley en el Parque del Oeste.

El presidente del Consejo de la Juventud de la Comunidad, Juan Martínez, pidió ayer «cordura», tanto al Ayuntamiento de Madrid, como a la Delegación del Gobierno a la hora de impedir el macrobotellón.

Martínez espera que las medidas que tomen sean «disuasorias y no violentas», lamentó que el Consistorio no organice actos lúdicos y recordó que algunos barrios no tienen fiestas por culpa de las obras de la M-30.

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