Crece el intercambio de viviendas como alternativa a la crisis

  • También está aumentando el canje de chalés u oficinas.
  • Algunos quieren dinero, otros irse a vivir al campo o a zonas con más trabajo.
  • Catalunya, Madrid, Valencia, Canarias e Islas Baleares, donde más se practica.
Los expertos aconsejan informarse de si el piso tiene cargas hipotecarias.
Los expertos aconsejan informarse de si el piso tiene cargas hipotecarias.
ARCHIVO
Los expertos aconsejan informarse de si el piso tiene cargas hipotecarias.

Cambio oficina céntrica en Barcelona, valorada en 600.000 euros, por piso en la ciudad o en zona de playa; intercambio piso de 100 metros cuadrados en Diagonal Mar por un chalé en la zona de Sabadell. Anuncios como éstos son cada vez más frecuentes. Y es que la permuta de bienes inmuebles está convirtiéndose algo habitual. Durante 2010, se hicieron un total de 4.285 solicitudes de trueques de pisos y casas en Catalunya a través del portal inmobiliario fotocasa.es.

La cifra es un 17,6% superior a la registrada el año anterior. Precisamente, en Catalunya es donde más se ha llevado a término esta práctica. Por detrás, se sitúan Andalucía, con 4.243 peticiones de intercambios de pisos; Madrid, donde se hicieron 3.766; Valencia, con 2.584; Canarias, con 867; las Islas Baleares, con 567, y el País Vasco, con 485 .

Esta práctica se empezó a implantar hace cerca de dos años. "La situación macroeconómica actual del país también ayuda a que se hagan este tipo de trueques", asegura Christian Palau, director del portal, porque, según él, "la gente busca alternativas creativas".

Cómo vender la casa

Los objetivos a la hora de hacer el canje son diferentes, si bien muchos quieren conseguir dinero. También están los que se quieren deshacer de viviendas que, como dice Palau, "no se pueden vender a través del mercado tradicional. Algunos también quieren cambiar de ciudad por cuestión de trabajo o buscan una segunda residencia. Hay gente que se quiere trasladar a núcleos más urbanos y abandonar otros más rurales". Y también hay quienes están dispuestos a "bajar de estatus" a raíz del cambio.

Es muy complicado

Por otra parte, el presidente de la Asociación Profesional de Expertos Inmobiliarios, Óscar Martínez, duda de que el canje acabe siendo efectivo. "Es muy complicado que llegue a buen puerto", explica. Y lo justifica: "Si ya es difícil encontrar un piso que te guste, todavía lo es más que dos partes encajen y estén de acuerdo". Los expertos aconsejan que a la hora de hacer un canje, los interesados se informen de si el nuevo inmueble que están a punto de quedarse tiene cargas hipotecarias.

Con todo, respecto a los trámites para realizar un trueque, es como si se tratara de dos compraventas y, por eso, los gastos se duplican: se deben pagar dos plusvalías municipales, dos facturas notariales y también dos facturas del registro de la propiedad, entre otras. La práctica del canje de pisos no es nueva en el norte de Europa, donde se empezó a poner en práctica para intercambiar casas de veraneo. Más adelante se hizo con casas donde se vivía habitualmente.

De la ciudad a un entorno rural

Si bien en Cataluña el tipo de oferta más frecuente de trueque es el intercambio de casas o pisos por otros más pequeños, en Madrid se hacen permutas de pisos en la ciudad por casas, pisos o chalés del área metropolitana. En Aragón lo que se solicita son intercambios de apartamentos en localidades cercanas a las pistas de esquí de Astún, Candanchú o Formigal, a cambio de viviendas en Madrid.

Mostrar comentarios

Códigos Descuento