Pese a no ser el primero, el cara a cara entre las dos reinas televisivas María Teresa Campos y Ana Rosa Quintana, que se produjo en el plató de Qué tiempo más feliz (Telecinco), levantó expectación y risas, a la vez que aclaraba viejas rencillas entre las que tradicionalmente han sido presentadas como las grandes rivales de la parrilla.

"¿Tú cuándo firmaste el contrato con Telecinco?", saltaba al poco de empezar el encuentro una María Teresa Campos recelosa, que explicó que siempre había sospechado que su compañera le había hecho la cama y había negociado su entrada a las mañanas de Telecinco antes de que ella abandonara ese puesto por otro en Antena 3.

La aludida desmintió rápidamente la información: "Lo hice después de que tú firmaras con Antena 3, lo sé porque lo pregunté", respondió.

María Teresa, reconfortada, aclaró entonces sus sospechas: "Hubo una persona, un colaborador tuyo, que me machacó", explicó, "me dijo que habías firmado antes con Telecinco y que yo había asistido a la mejor representación de toda mi vida (...) Esa puñalada la he tenido aquí clavada", concluyó.

"Somos muy distintas, tú eres muy intensa, te quedas las cosas entro, eres muy sensible, muy vulnerable...", argumentaba Ana Rosa.

La cita estuvo salpicada también de bromas y puyas. María Teresa elogió los brazos delgados de Ana Rosa ("no se te han estropeado con los años que tienes", observó)y ésta le replicó que era una cuestión de edad, destacando que Campos era mayor que ella.

Esta por su parte se autohomenajeó y explicó que siempre había sido muy moderna vistiendo en la vida personal, aunque en los platós la presentaran con trajes de chaqueta, y que, como Ana Rosa, tenía tobillos finos, aunque luego estuviera algo más gordita que la primera.

María Teresa también recordó cómo Ana Rosa la había batido en audiencia en la misma franja horaria y pidió explicaciones: "No te perdonaron que te cambiaras de cadena", la tranquilizó esta, "además, había expectación porque yo acababa de tener los niños".

"Mañana llegará alguien y me pasará a mí lo mismo, esto es un medio efímero", reflexionó Ana Rosa, lo que dio pie a que su interlocutora pudiera recordarle con firmeza: "Sí, tú también eres efímera".

Sin embargo, su tiempo no ha pasado todavía: el programa fue seguido por 1.727.000 televidentes y alcanzó una de las cuotas más altas de las obtenidas por Telecinco durante la jornada, superando a España directo y al cine de Antena 3.