Los exdirectores del Museo de Bellas Artes San Pío V, —Felipe V. Garín, Carmen Gracia y Ximo Company— han firmado este viernes un escrito 'in memoriam' del último director del Museo de Bellas Artes San Pío V, Fernando Benito, fallecido anoche tras una larga enfermedad. Unas líneas en las que han destacado su "notable contribución" a la historia del arte valenciano, en especial, al mundo de la pintura de los siglos XVI y XVII.

Sus antecesores al frente del San Pío han reconocido "la dedicación científica del Dr. Benito al frente de la primera pinacoteca de la Comunitat Valenciana", desde que inició su andadura al frente de la misma en 1996 y se mantuvo en el cargo hasta que su delicado estado de salud no le permitió continuar en su trabajo a fines de 2009.

"Quienes le hemos conocido sabemos bien de su compleja personalidad, siendo fundamentales sus notables contribuciones a la historia del arte valenciano", en especial al mundo de la pintura de los siglos XVI y XVII, con buenos y profundos estudios, por ejemplo, sobre Sarinyena, Francisco Ribalta y sus discípulos, ha subrayado.

Destacan también su investigación sobre la arquitectura y las colecciones pictóricas del Colegio y Museo del Patriarca, así como su "valiosísima contribución" para que la gran colección artística de Pere Maria Orts-Bosch se sumara a los ya ricos fondos del Museo San Pío V.

Los exidirectores recuerdan en su escrito que Benito se educó bajo el sabio magisterio universitario del Dr. Pérez Sánchez, lo que le proporcionó un buen conocimiento de la pintura italiana, y por supuesto de la española, sin renunciar por ello a otros estudios sobre los Hernando o incluso sobre el apasionante mundo de Vicente Maçip y Joan de Joanes.

En la Universitat de València ejerció durante muchos años como profesor de historia del Arte, abundando casi siempre en una docencia orientada a su especialidad más querida.

"Valencia ha perdido un buen conocedor de la pintura valenciana" y al último director que hasta ahora ha tenido el Museo de Bellas Artes San Pío V. "Sus numerosos escritos científicos y su magisterio universitario están ahí, poniendo de manifiesto su original manera de investigar, ver y entender el arte, junto a su prolongada dedicación a esa extraordinaria pinacoteca".

Garín, que este viernes ha presentado la muestra 'A pulso' en la Chirivella Soriano, ha manifestado que la muerte de Benito "es una gran pérdida para el arte valenciano" y para él, un "vacío inmensamente personal".

Además, de su labor como profesor universitario, como director del Museo de Bellas Artes ha realizado una "labor de investigación importante, de exposiciones serias y centradas en un período fundamentalmente particularmente rico de la historia de nuestra pintura que son los siglos XVI y XVII". Para Garín, "sus exposiciones han hecho una revisión rigurosa que hace pensar y reflexionar".

Pero "quizá la huella de todo director de museo son las obras que dejas allí" y en su caso son "manifiestamente visibles" las que donó Pérez María Orts, ha remarcado. "Si el museo era importante antes, desde este donativo, ha alcanzado importancia todavía mayor" y esa donación es fruto de una "labor muy personal de Fernando", ha asegurado Garín.

Asimismo, ha querido valorar la "habilidad" para reorganizar el museo pese a las "dificultades" y "obra todavía inacabada", y poder "mostrar las obras más importantes". En su opinión, Benito "supo resolver limitación espacial con mucho ingenio".