El presidente de la Sociedad Cooperativa General Agropecuaria (Acor), Carlos Rico, afrontará hoy, viernes 4 de febrero, su segunda reelección en el cargo, al que accedió en mayo de 2003, con el objetivo de apuntalar los nuevos proyectos de la cooperativa vallisoletana, como es el caso del biodiésel o la posibilidad de transformar el trigo-fuerza, y sujetar el sector azúcar, donde ve las mayores dificultades para los años venideros.

En una entrevista concedida a la agencia Europa Press, Rico ha hecho un llamamiento a los socios de Acor para que ejerzan su derecho al voto, al que ha llegado a referirse como una "obligación", ante la necesidad de apuntalar el desarrollo de la cooperativa que en los últimos ocho ejercicios ha diversificado su negocio desde el tradicional remolachero-azucarero al refino de azúcar junto a la producción de biodiésel y de energía fotovoltaica.

Aunque el periodo de presentación de candidaturas todavía sigue abierto, todo apunta a que Carlos Rico será el único aspirante a la Presidencia de Acor, un hecho que el actual dirigente ha achacado a la estructura y escenario del sector "que no invitan a ponerse al frente de una situación delicada que supone, además, tomar decisiones complejas, asumir riesgos y, en definitiva, tirar del carro". "Venir aquí es venir a trabajar y mucho", ha explicado.

La celebración de la asamblea extraordinaria, en la que se someterá a votación la renovación parcial del Consejo Rector de Acor —su presidente, cuatro vocales titulares y un vocal suplente— está prevista a las 09.30 horas en primera convocatoria y a las 10.00 en segunda, cuando quedará constituida la mesa electoral y abierta la asamblea hasta las 14.15 horas. De este modo, los socios podrán ejercer su derecho al voto a lo largo de toda la mañana.

Por su parte, el escrutinio, recuento de votos, proclamación de candidatos y aceptación de los cargos tendrá lugar a partir de las 15.30 horas.

Precisamente, en los planes de Rico para el próximo mandato está mantener el actual Consejo Rector ya que está integrado por personas que han demostrado, según sus palabras, "su compromiso personal, su entrega profesional y, además, su capacidad de análisis sensato y coherente buscando siempre el beneficio de la cooperativa". Carlos Rico ha ido más allá en sus valoraciones y se ha mostrado "muy orgulloso" de tener esos compañeros de viaje que seguirán con él en el próximo mandato si así lo deciden los socios.

Carlos Rico ha admitido sentirse apoyado por el agricultor productor, colectivo en el que se ha englobado como profesional del sector, y ha aprovechado la ocasión para defender también su trabajo y el de su Consejo Rector por el socio inactivo, "al que hemos tenido en cuenta y al que hemos dado acomodo".

En la cooperativa "cabemos todos"

"En esta cooperativa cabemos todos", ha asegurado el presidente de Acor, quien, tras admitir que los tiempos para el sector son "difíciles", ha recordado a los socios que la única posibilidad que hay para lanzar hacia adelante todos los proyectos de la cooperativa es contar con el apoyo de "todos" y cada uno de sus integrantes. "O todos los socios empujamos o el camino va a ser mucho más difícil", ha sentenciado.

Respecto al futuro de los proyectos de Acor, Carlos Rico se ha mostrado "muy optimista" tanto para el caso de la planta de biodiésel, un proyecto que ha augurado que se va a desarrollar muy bien, como para el de trigo-fuerza "porque el incremento comercial y el nicho de mercado que hay en este sector es muy importante y significa desde el punto de vista agrario unos rendimientos muy muy sensatos".

A su juicio, las mayores dificultades para los próximos años pasarán por sujetar precisamente el sector del azúcar donde ha abogado por sentar en una mesa a todos los agentes implicados para empezar a pensar qué opciones de futuro hay y cómo se puede defender el futuro remolachero por encima de todo. "Sin remolacha no somos nada", ha advertido.

En su repaso de sus ocho años de gestión, Rico ha reconocido que ha atravesado por momentos muy difíciles tanto en lo personal como en lo profesional en los que ha tenido que tomar decisiones "muy serias y complejas" porque suponían riesgos pero que han demostrado, a su juicio, que optó por el "camino correcto" y que "hoy por hoy tenemos ese futuro abierto", a pesar de que el horizonte temporal de la OCM del azúcar en 2014 "está ahí".

"Para nosotros hubiera sido muy fácil vender la idea de que la reforma impedía mirar al futuro y, muy al contrario, sabíamos que había que asumir el riesgo y que, pese a las enormes dificultades, había que seguir produciendo remolacha y azúcar", ha manifestado el presidente de Acor, para quien la única forma de salvar la estructura productiva agraria era plantear esa posibilidad de futuro.

"Si no teníamos esa puerta abierta al futuro difícilmente íbamos a poder vislumbrar lo que esta situación nos deparaba", ha continuado, Rico quien se ha mostrado "muy orgulloso" de que en estos momentos Acor sea capaz de ofrecer a sus socios una "situación estable de precios mínimos sensatos e interesantes" para que los agricultores puedan seguir cultivando y tengan una garantía de cobro, de ingresos y de beneficios en sus explotaciones.

Dicho esto ha concluido: "Se puede tener como portafolio de la imagen de Acor, agricultores que tienen seguridad y que la van a seguir teniendo".