Olaya Moscardó, la niña de Alzira de un año de edad, a la que le fue amputado el antebrazo izquierdo y parte de la mano derecha como consecuencia de una meningitis con complicaciones, ha sido nuevamente operada con éxito por el cirujano Pedro Cavadas.

La intervención, que duró aproximadamente una hora, ha consistido en una cirugía convencional en la mano izquierda para que la niña pueda tener una "pinza básica" mientras se desarrolla y pueda llegar a coger cosas de forma normal. De momento deberá permanecer un mes con la mano vendada.

La operación ha ido "muy bien", ha asegurado Purificación Cortebarrada, madre de la niña. Olaya deberá permanecer durante veinticuatro horas en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) de la clínica Virgen de Consuelo de Valencia.

"Mañana será pasada a planta y el viernes ya podremos irnos a casa", ha explicado su madre. Además, aseguró haber visto a su hija "muy despierta y animada, viendo la tele. Ya ha comido y lo ha tolerado todo".

Por su parte, el cirujano Cavadas restó importancia a su trabajo, "no es una cirugía relevante". Sin embargo, la que hasta la fecha es la última intervención, supondrá una gran mejoría en el estado de la niña.

Esta operación, la número cuarenta hasta el momento, no será la última a la que se tenga que someter Olaya, no obstante. Cuando haya crecido lo suficiente, deberá afrontar nuevas intervenciones. Pero al menos, podrá coger las cosas que se muestren a su alcance.

Tras un periodo de rehabilitación para recuperar la movilidad, Olaya volverá a ingresar en el quirófano, en el plazo de un mes, para someterse a la reconstrucción de otras partes de su cuerpo. Lo primero será una intervención de nariz para abrir de nuevo sus orificios puesto que desde que se le cayera el hueso de costilla que le habían implantado, no podía respirar.