Greenpeace ha exigido la retirada de la enmienda a la Ley de Economía Sostenible que permitiría que Petronor pueda "burlar" la ley de Costas en la localidad vizcaína de Muskiz y que ha sido diseñada "a la carta".

La organización ecologista ha señalado que esta enmienda, que "el PSOE y el PNV han pactado", reformará la Ley de Hidrocarburos para permitir que "las refinerías tengan derecho a prorrogar sus concesiones y ocupar el dominio público costero", incluso tras la conclusión de sus permisos actuales.

De este modo, ha denunciado que esta enmienda "a la carta" beneficiará "específicamente a la refinería que Petronor-Repsol tienen en la marisma de Muskiz, Zierbena y Abanto" ya que permitirá "su permanencia en su ubicación actual otros treinta años, a pesar de ocupar la costa y estar situada en pleno casco urbano de Muskiz". Según ha advertido, esta situación "se agrava" por la ampliación de las instalaciones con una planta de coque "altamente contaminante".

Greenpeace ha censurado que la refinería ha sido objeto de "numerosas denuncias por irregularidades legales en sus procedimientos de autorización y funcionamiento, ha sufrido continuas alarmas e incidentes, además de haber provocado afecciones a la salud de la población y daños ambientales de todo tipo".

La responsable de la campaña de Costas de Greenpeace, Pilar Marcos, ha demandado que "la ocupación del litoral debe ser innegociable" para el PSOE y ha insistido en que "es injusto centrar el debate el debate de la Ley de Costas en chiringuitos y en derribar pequeñas viviendas, mientras se permite enmendar una ley a medida para que esta fabrica de cambio climático y contaminación continúe su actividad".