Más inmigrantes piden nacionalizarse españoles

En 2005 se tramitaron 681 expedientes de nacionalidad en el Registro Civil de Valladolid, casi el doble que en 2004 y ocho veces más que en el año 2000.
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Pablo Elías
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Las solicitudes de nacionalidad en el Registro Civil de Valladolid se han multiplicado por ocho en los últimos cinco años. Mientras que en el año 2000 hubo 87 peticiones, en 2003 ascendieron a 280, se elevaron a 377 durante 2004 y el año pasado fueron ya 681 los expedientes tramitados.

La mayoría de estas solicitudes fueron de adquisición, es decir, presentadas por inmigrantes que quieren asumir la nacionalidad española. Sin embargo, en estas cifras se incluyen también las peticiones de españoles que deciden conservar la nacionalidad, a pesar de vivir y trabajar en el extranjero, o las de aquellos que, debido a múltiples circunstancias, la perdieron y ahora solicitan recuperarla.

Todos los derechos

Que se hayan presentado 681 solicitudes en 2005 no significa que todas se hayan concedido. Tras entregar la documentación hay que realizar varias entrevistas, en el Registro y en la Policía, y esperar a que se estudien los papeles aportados. El proceso puede demorarse hasta dos años. Eso sí, una vez que se concede la nacionalidad, se jura la Constitución y la persona adquiere todos los derechos. Posee su DNI, puede votar en las elecciones o presentarse como candidato, se le permite viajar por Europa sin necesidad de visado y tiene derecho, por ejemplo, a concurrir a unas oposiciones a funcionario.

Nada diferencia a estos nuevos ciudadanos del resto de los españoles, ni en derechos ni en obligaciones.

En primera persona

Silvia Rivero. Inmigrante boliviana

«Un simple DNI te abre las puertas»

Se acuerda perfectamente del día que llegó a España, el 17 de enero de 2001. Desde entonces, reconoce que no le ha resultado fácil, «no tienes las mismas oportunidades de acceder a un trabajo de cara al público, aunque tengas formación. Poco a poco las cosas van cambiando». Hacer papeles le parece un rollo, pero lo hace por sus hijos, «quiero que sean españoles porque aquí es donde está nuestra vida y un simple DNI te abre las puertas». El proceso le resultó gracioso, «te preguntan el nombre de los Reyes, del presidente de la comunidad y a mis hijos, el mayor tiene 15, le preguntaron si pertenecía a alguna guerrilla armada», bromea. Adora Bolivia, su país, pero cambiar de nacionalidad no es un capricho: «Yo ahora tengo trabajo estable y mi marido, también. Tenemos casa en propiedad y, sin embargo, como mi permiso de residencia caduca en unos meses, los bancos no me dan un crédito, aunque sepan que me quedo y que me van a renovar el permiso». «Lo fundamental para que te den la nacionalidad es demostrar que tienes medios económicos y no vas a ser una carga para el Estado, sino que contribuyes como cualquiera», dice. Lleva un año en espera. Cuando se lo concedan, serán siete españoles más.

Bio. Tiene 34 años y vive en España desde hace cinco, con su marido y sus hijos. Secretaria ejecutiva y contable, ha montado su propio locutorio en la avenida de Palencia.

Documentación básica

Tarjeta de residencia y pasaporte: Originales y copia.

Certificado consular de nacionalidad: Inscripción consular.

Certificado de nacimiento: Con fecha reciente.

Certificado de antecedentes penales: Del país de origen.

Certificado de empadronamiento: Se obtiene en el Ayuntamiento.

Documento que justifique el tiempo de residencia legal en España: Expedido por la Policía.

Medios de vida: Contrato de trabajo, últimas nóminas, declaración de la renta.

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