Ni las películas de los geniales hermanos Joel y Ethan Coen acostumbran a ser comerciales, ni el western es un género que en las últimas décadas atraiga a los espectadores a las salas de cine. Pero Valor de ley (True Grit), lo nuevo de los Coen, ha roto con los dos obstáculos. Un ajustado presupuesto de 38 millones de dólares - unos 29 millones de euros -, que ya ha generado, en la taquilla estadounidense, casi el triple con más de 111 millones y en apenas 3 semanas.

No sólo prima lo comercial y el éxito entre el público. También las críticas se han sumado al excelente recibimiento de este western. En el portal norteamericano Metacritic, que recoge las valoraciones de los principales críticos del país, obtiene una media de 80 puntos sobre 100. En otra de las webs de referencia en este sentido, Rotten Tomatoes, logra una puntuación aún muchísimo mejor, nada menos que 95.

Se trata de una nueva adaptación de una novela escrita por Charles Portis que ya dio pie al año siguiente de su publicación, en 1969, a un filme dirigido por Henry Hathaway que protagonizó John Wayne - y le valió su único Oscar, como mejor actor principal -. Una historia de iniciación a la vida y de veteranos que ya están de vuelta de todo en torno a una venganza.

Una muchacha de 14 años contrata a un viejo sheriff tuerto y a un Texas ranger para que la ayuden a encontrar al asesino de su padre. La chica está interpretada en esta nueva versión por la joven Hailee Steinfeld, en su debut en un largometraje; mientras que Josh Brolin es el villano, Matt Damon interpreta al Texas ranger, y Jeff Bridges - precisamente, ganador del Oscar en la pasada edición por Corazón rebelde -, es quien retoma el personaje del sheriff que en su momento encarnó Wayne.

En contraste con el haber conseguido traspasar la barrera de los 100 millones de dólares en Estados Unidos, las películas de los Coen que más habían recaudado allí eran la oscarizada No es país para viejos, 74,2 millones de dólares; Quemar después de leer, 60,3 y O Brother!, 45,5.

Bailando con lobos, dirigida y protagonizada por Kevin Costner, y estrenada en 1990, obtuvo 7 Oscar, entre ellos el de mejor película y director, además de un sonado éxito en las salas comerciales. Clint Eastwood también logró reverdecer los laureles del género con la obra maestra que es Sin perdón, galardonada con 4 Oscar, incluyendo también el de mejor película y director.

Pero en los últimos años, pocos westerns - uno de los géneros cinematográficos más genuinos del Hollywood clásico - han llegado a realizarse y pese a que algunos de ellos incluso han cosechado excelentes críticas, escasa repercusión han obtenido en taquilla. Es el caso, por ejemplo, de Open Range (2003), con Kevin Costner y Robert Duvall; El tren de las 3:10, con Russell Crowe y Christian Bale o Appaloosa (2008), con Ed Harris y Viggo Mortensen.

Ahora, y gracias a los hermanos Coen, el Salvaje Oeste vuelve a estar en boga en la gran pantalla. En España tiene su estreno previsto para  el próximo 4 de febrero. Antes, el 25 de enero, se habrán anunciado las candidaturas a los premios Oscar de esta edición y Valor de ley, ninguneada en las nominaciones a los Globos de Oro, puede tener mucho qué decir.