El desprendimiento de varias piedras provocado por el temporal de lluvia ha obligado a cortar al tráfico de vehículos en varios carriles de carretera de la provincia de León, según informaron a Europa Press fuentes de la Guardia Civil de Tráfico.
Así, desde las 18.15 horas se encuentra cerrado un carril de la CL-631 (Villablino-Ponferrada) a su paso por Cuevas del Sil, en el kilómetro 49. En la CL-626 (Villablino-Guardo), en el kilómetro 72, a la altura de Garaño, se ha tenido que cortar asimismo un sentido. Además, en esa misma vía una gran bolsa de agua ha obligado a cerrar la circulación a la altura de Rabanal de Luna.
Por la caída de rocas en el firme tampoco se puede circular por un carril de la LE-331, a la altura del kilómetro 18,300, en Puebla de Lillo.
Por otra parte, la presencia de piedras en la calzada exige extremar la precaución en la LE-711 y en la LE-715.
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