La Asociación de los Editores de Andalucía (AEA) se adhiere al "espíritu" del documento que han registrado alrededor de diez organizaciones de profesionales de la cultura andaluza como la Asociación de Empresas de Artes Escénicas de Andalucía (ACTA), la Asociación de la Profesionales y Compañías para el Desarrollo de la Danza en Andalucía (PAD) o las organizaciones de trabajadores autónomos (UPTA) en el Palacio de San Telmo, sede del Gobierno andaluz, en el que muestran "su malestar" ante los recortes que la Consejería de Cultura tendrá en los próximos presupuestos de 2011, que se aprobarán en breve.

La presidenta de la AEA, María Luisa Amores, ha expresado a Europa Press que el sector editorial se una "a la protesta" y se adhiere al documento. Además, ha afirmado que el recorte en los presupuestos de la Consejería de la Cultura, un 25,5 por ciento, conlleva "una preocupación evidente en el mundo del libro".

Por su parte, el presidente de ACTA, Sergio Casado, ha señalado a Europa Press que se ha registrado un documento donde "manifestamos nuestro desacuerdo en los presupuestos, ya que no entendemos la reducción tan enorme en la Consejería de Cultura, y prevemos que muy probablemente seamos el sector productivo de la cultura los que nos veamos especialmente perjudicados por esto".

Así, y según un comunicado, en este documento-carta registrado se puede leer que "si, por una parte, en sus discursos públicos, nuestros representantes políticos coinciden en destacar una y otra vez a la Cultura como sector estratégico, por otra, en la práctica real, se está a punto de aprobar un recorte del presupuesto de la Consejería de Cultura de un 25,5 por ciento, porcentaje muy superior al que se aplica en otras consejerías".

Además, las asociaciones convocantes señalan que "con los recortes anunciados pierden sentido las palabras pronunciadas el pasado mes de mayo por su consejero, Paulino Plata, en su primera comparecencia en Comisión parlamentaria, cuando afirmaba que en este momento político y económico complejo la cultura debe ocupar en el modelo de 'Andalucía Sostenible' un papel primordial como fuente de integración, riqueza y empleo".

En este sentido, Amores considera "una contradicción" que se hable de "sector primordial" y ahora se efectúe un recorte tan "abusivo". Asimismo, ha manifestado que la cultura, y en su caso el sector del libro, no puede analizarse desde el punto de vista de las cifras, sino que hay que tener en cuenta "la aportación de valores, conocimiento y el acceso a la cultura de la sociedad, así como la transmisión del patrimonio cultural escrito".

Asimismo, en el texto se recoge que el sector de la cultura, "ampliamente intervenido durante los últimos 30 años por las administraciones, sufre actualmente gravísimos problemas —caída en picado de la facturación, aumento de la morosidad, bajadas de los precios de lo producido, etcétera— y las medidas propuestas, amén de una clara disminución de la calidad artística, van a provocar con toda seguridad la pérdida de cientos de puestos de trabajo y la práctica paralización de todo un sector económico que mueve al año decenas de millones de euros, además de una hemorragia de talentos hacia otras zonas geográficas".

Del mismo modo, los convocantes ven "inaceptable el abandono de la cultura a las leyes de mercado que ha ofrecido la Consejería de Cultura en recientes conversaciones como solución a la situación de crisis".