El Parlamento iraquí aprobó este martes los 34 aspirantes propuestos por el primer ministro Nuri al Maliki para formar un nuevo Gobierno y puso así fin al vacío gubernamental que ha vivido Irak durante más de nueve meses tras las elecciones.

Los candidatos a ministros del nuevo Ejecutivo, que no fue presentado al completo, fueron votados uno a uno y recibieron la mayoría de los votos de la Asamblea Legislativa, para inmediatamente después jurar su cargo.

El puesto del propio Al Maliki, que repite legislatura, también fue refrendado, junto a 26 titulares de ministerios y ocho ministros de Estado.

Once carteras han ido a parar a la Alianza Nacional, con predominio chií, que agrupa al Estado Derecho, de Al Maliki; la Alianza Nacional Iraquí, de Amar al Hakim, y el bloque Sadr, leal al clérigo radical Muqtada al Sadr.

Por su parte, la coalición opositora Al Iraqiya, del ex primer ministro Ayad Alaui, en la que participan dirigentes suníes y chiíes, ha conseguido siete ministerios.

Algunos de los que repiten en el cargo son el ministro de Exteriores, Hoshiyar Zebari, y el portavoz del Gobierno, Alí Dabag.

Este martes no se eligieron a todos los ministros porque se está revisando la candidatura de los aspirantes a algunas carteras, así como la posibilidad de incluir más mujeres en el futuro Ejecutivo, que contará con un total de 45 ministros, incluido Al Maliki.

En ese sentido, en un discurso previo a la votación, el primer ministro aclaró que hay dos razones por las que no ha propuesto un Gabinete al completo.

En primer lugar explicó que solo fue presentada una candidata por los bloques políticos, a los que les solicitó que propusieran más mujeres.

Además, Al Maliki agregó que los currículos de algunos candidatos a ministros no le fueron entregados hasta este día, por lo que necesita más tiempo para hacer una buena elección.

En cuanto a carteras clave como Defensa, Interior y Seguridad Nacional, adelantó que él mismo las gestionará en funciones hasta que se definan los nombres de las personas que las dirigirán permanentemente.

"Los nombramientos de los ministros no satisfacen mi ambición ni la de nadie (dijo Al Maliki). Pero no voy a ser pesimista, el nuevo Gobierno tiene potencial y lo importante es la intención y unir los esfuerzos para que estos ministerios tengan éxito. Este gobierno ha sido formado en circunstancias difíciles".

Y recordó que "formar un ejecutivo de unidad nacional es el tipo de gobierno más difícil de todo el mundo y las dificultades las asume el primer ministro porque tiene que satisfacer a todos lo bloques políticos".

Antes de la votación, el Parlamento aprobó el programa del Gabinete con 43 puntos que, según Al Maliki, se basa en un "Irak independiente y plural".

"La prioridad del Ejecutivo será respetar la Constitución de Irak y cualquier reforma de esta Constitución debe lograr la estabilidad política y ampliar la participación en el proceso político", destacó.

Al Maliki anunció que las prioridades del nuevo Ejecutivo serán construir un Estado de derecho, el respeto a los derechos humanos, el rechazo al terrorismo, impulsar la cultura de la tolerancia, mejorar las relaciones con los países vecinos y continuar con la construcción de las Fuerzas Armadas.

Además, también trabajará para lograr una justicia independiente, continuar la reconciliación nacional, luchar contra la corrupción, liberalizar y avanzar hasta la estabilidad de la economía y luchar contra el desempleo, entre otros.