El coordinador general de IULV-CA, Diego Valderas, ha lamentado este martes que tanto la ministra de Medio Ambiente, Rural y Marino (MARM), Rosa Aguilar, como la consejera de Agricultura y Pesca, Clara Aguilera, sean "incapaces de pasar de palabras a hechos" en el sector agroalimentario que, a su juicio, lleva "mucho tiempo marcha atrás, como los cangrejos".

Así lo ha indicado en rueda de prensa en Jaén, donde se ha referido a la situación de la política agraria y de la necesaria reforma de la PAC para poner de manifiesto que la ministra y la consejera "sólo hablan de palabrillas o de titulares".

En este sentido, ha asegurado que un sector "tan importante" para la comunidad no puede estar a expensas de "titulares o palabras que no se corresponden luego con los presupuestos en el marco de la apuesta de la política agraria comunitaria y en el de la apuesta cada ves más insuficiente en los presupuestos de la Junta y del Estado", de lo que es muestra que la Consejería de Agricultura es la que presenta "un mayor nivel de recorte" en las cuentas autonómicas para 2011.

Por ello, ha asegurado que pasar a los hechos supone más inversión para mantener el nivel de desarrollo y crecimiento que un sector estratégico necesita, lo que "significa mantener las ayudas y trabajar para mantenerlas más allá de 2013 donde se prevé que puedan finalizar". Junto a ello, es necesario también un "reforzamiento" del sector para ser "capaz de ejercer la defensa de la agricultura con un mayor nivel de soberanía al 'dumping' que tienen los capitales, muy especialmente con el tema de Marruecos".

Valderas ha hecho estas declaraciones en una rueda de prensa en la que también ha aludido a la posición de IU ante los presupuestos de la Junta de Andalucía, a los que va a presentar 328 enmiendas porque "son manifiestamente mejorables" y "no alcanzan la decencia económica ni la decencia de la apuesta política fijada" por el presidente del Gobierno andaluz, José Antonio Griñán, en sus discursos.

Con esas enmiendas, la federación de izquierdas buscará más empleo y política social, el incremento de la inversión pública y un fuerte impulso al nuevo modelo de desarrollo solidario y sostenible que "casi desaparece" de las cuentas. Con ese fin, piden aumentar los ingresos en un mínimo 652 millones, a través de planes de lucha contra el fraude fiscal, la corrupción especulativa y la economía sumergida, de modo que se ponga en marcha "otra política fiscal".