El secretario general del PSOE en Teruel, Vicente Guillén ha señalado hoy que que Partido Popular (PP) y su concejal Manuel Blasco habrían podido "instigar y alentar" la situación que se ha creado en el Consistorio turolense con la salida del Partido Aragonés (PAR) de Miguel Ferrer, que ha dejado la Alcaldía, y la de otros dos concejales.

Guillén ha pedido a los 'populares' que si no quieren hacerse cargo de la Alcaldía de Teruel apoyen a la socialista Lucía Gómez, actual alcaldesa en funciones. Sobre si el PSOE presentará o no candidato a la Alcaldía el próximo 17 de noviembre, ha explicado que, según la Ley electoral, "todos los cabezas de lista pueden ser candidatos, a no ser que un partido renuncie expresamente a ello".

En rueda de prensa, el socialista ha asegurado que "el PSOE no intuía" que el hasta ahora alcalde, Miguel Ferrer fuera a hacer lo que ha hecho y que, a juicio de esta formación es una decisión "irresponsable" más grave aún, ha dicho, al no dejar Ferrer su acta de concejal.

Además, Vicente Guillén ha dado credibilidad a algunas informaciones, en las que se apunta la posibilidad de que Ferrer y Manuel Blasco (PP) habrían podido reunirse. En su opinión, "el PP conocía el malestar de Miguel Ferrer", ha dicho Vicente Guillén, quien incluso ha afirmado que "creemos que Manuel Blasco y el PP han podido instigar y alentar la deserción de Ferrer, pero a cambio de qué". La respuesta, ha añadido, "la tienen que dar los interesados".

El secretario general del PSOE en Teruel se ha mostrado convencido de que toda esta situación "maximiza los beneficios para el PP", al que ha pedido que deje de hacers la "víctima" porque, en caso de no haber una mayoría absoluta, tengan que hacerse cargo de la Alcaldía.

El socialista ha señalado que si Manuel Blasco cree que hacerlo "es un marrón" tiene dos salidas: "Puede apoyar al PSOE y, por lo tanto, hacer una mayoría estable que permita aprobar los presupuestos, el PGOU y que la ciudad siga funcionando"; la otra opción es que "puede ceder el paso a Emma Buj que, es una persona trabajadora, joven, comprometida con la ciudad".

Vicente Guillén ha insistido en que el PSOE "no renunciará" a buscar la mayoría absoluta para conseguir la Alcaldía, a pesar de que ha reconocido que "es improbable que en torno a nuestro partido pueda haber una mayoría para gobernar". Por lo que "vemos como probable que el PP pueda tener la responsabilidad de la alcaldía, pero si la tienen, no lo hacen ni por lealtad a la ciudad, ni por un sacrificio ímprobo para coadyuvar al interés general. Lo harán por dos cosas: por imperativo legal y por interés de su propio partido".

Guillén no ha aclarado si presentarán o no un candidato a la Alcaldía porque según ha dicho, la Ley Electoral recoge que todos los cabezas de lista de todos los partidos "pueden ser candidatos" a no ser que renuncien. Lo que tiene claro es que la mayoría por la que el PSOE tuviera la Alcaldía, nunca puede pasar por el voto de Miguel Ferrer, al que "su partido ha calificado como tránsfuga".

El Partido Aragonés ha anunciado en las últimas horas que se abstendrá en la votación sea cuál sea el candidato. Y Guillén ha señalado que todavía no han hablado con Chunta Aragonesista, aunque ha afirmado que "el portavoz de CHA tiene en su móvil un mensaje que yo le dejé y al que no ha contestado", aunque ha considerado que "es complicado que quieran tener un acercamiento al PSOE".

En cualquier caso, el secretario general de los socialistas turolenses ha manifestado que seguirán intentando sumar esa mayoría y que la decisión última la podrían tomar un día antes de la elección de alcalde. También ha reconocido que no han hablado con Marcelino Iglesias, pero sí con la Ejecutiva Regional de su partido que les insta a intentar mantener la alcaldía y a mantener "una actitud leal y de colaboración", una vez que haya un nuevo alcalde.

Y es que, Vicente Guillén ha asegurado que su partido colaborará y trabajará por la ciudad "sea quien sea" el nuevo alcalde.

El portavoz del grupo del PSOE en el Ayuntamiento, Pedro Joaquín Simón, ha resaltado que el consistorio alcanza los 45 millones de euros en deuda, que también procede de la época en el que Manuel Blasco fue alcalde de Teruel (1999-2003). En este sentido, ha recordado que el ayuntamiento ya dispone de un "un plan preparado para reestablecer el equilibrio financiero".