La consejera andaluza de Salud, María Jesús Montero, ha admitido este jueves que "no es de extrañar" que en el caso de la niña que ha tenido un bebé de 10 años y su familia, de origen rumano, "no hubiesen tenido un control y seguimiento médico, ya que, al parecer, estaban de paso" en la localidad sevillana de Lebrija.

En declaraciones a Europa Press, Montero ha admitido que desde su departamento "no tenemos más datos de los que ya ha aportado la Consejería de Igualdad y el Ayuntamiento de Lebrija" y ha recordado que "todas estas circunstancias las está controlando desde los Servicios Sociales".

No obstante, ha reconocido que "no sería de extrañar que una persona o familia que esté de paso, no esté incorporada al programa de seguimiento sanitario", en referencia a algunas informaciones que apuntan al hecho de que esta menor ya venía embarazada desde su país de origen.

En este sentido, la Fiscalía de Sevilla ya está a la espera de recibir los informes de los Servicios Sociales de este Ayuntamiento que determinen cuestiones como si la niña estaba escolarizada y la asistencia médica recibida tanto por ella como por su bebé.

En concreto, la Fiscalía de Sevilla ha decidido abrir un expediente de protección de menores al objeto de "proteger" tanto a la menor rumana de diez años que ha dado a luz en un hospital de Jerez de la Frontera (Cádiz) como a su bebé, y ha aclarado que este expediente "no se ha abierto para perseguir delitos".

Fuentes del Ministerio Público consultadas por Europa Press han querido dejar claro en este sentido que el expediente se ha abierto para "proteger" tanto a la madre como al recién nacido.

Por otra parte, el Consistorio lebrijano ha informado este jueves en un comunicado que, desde el propio Ayuntamiento y desde la Alcaldía y los Servicios Sociales Comunitarios, "se han llevado a cabo todas las actuaciones pertinentes desde que el Consistorio fue conocedor de este hecho".

Reconocimiento pediátrico

Así, y según ha informado, en la tarde de este miércoles el equipo de Menores de Servicios Sociales del Ayuntamiento visitó el domicilio donde vive la familia de la niña de diez años. Tras esta visita, la madre de la menor, ésta y su hijo se dirigieron al Centro de Salud de la localidad, donde se les realizó un reconocimiento pediátrico.

En la actualidad, el Ayuntamiento investiga el arraigo o no de esta familia en el municipio, ya que ni la menor ni su familia directa figuran en el padrón. Asimismo, se están verificando las informaciones "contradictorias" sobre este asunto, "ya que nunca han requerido de ningún tipo de servicio municipal ni sanitario" de la localidad.