La Comunitat registra unos 100 casos anuales de violencia física contra el profesorado, según FETE-UGT

Los comportamientos disruptivos en las aulas generan altos niveles de estrés a más del 50% de los docentes
Estudiantes
Estudiantes
CEDIDA
Estudiantes

Casi un 2 por ciento del profesorado admite que los alumnos le agrede con algún tipo de violencia física, lo que supone que si en la Comunitat Valenciana hay unos 50.000 profesores se producen cerca de un centenar de casos al año, según ha señalado el secretariado de salud Laboral y Medio Ambiente de FETE-

Ugt pv, Paco Crespo.

Esta es una de las cifra que figura en las conclusiones de una encuesta realizada por FETE-UGT, con la que se pretendía abordar las distintas situaciones de violencia que se dan en los centros escolares y constatar que suponen un factor de riesgo psicosocial para la salud de los trabajadores de la enseñanza y que este jueves ha presentado Crespo acompañado por la secretaria de salud Laboral y medio Ambiente de FETE-UGT, Lydia Asensio, y el técnico de Prevención de FETE-UGT, Fernando Alvarez.

Así, Crespo ha aclarado que "no hay una situación de violencia generalizada" en las aulas sino que se trata de casos "esporádicos". No obstante, ha señalado que aunque un 2 por ciento aparente ser un porcentaje bajo si se aplica a los número absolutos de docentes en la Comunitat supone unos cien casos anuales de algún tipo agresión física de cualquier intensidad, basta con un ligero empujón, lo que "es mucho". Antes estos hechos, la mitad del profesorado (50,2 por ciento ) tiene miedo de ser agredido por algún alumno.

Al respecto, ha apuntado que estas actitudes, entre otros factores, provocan que el 20 por ciento bajas labores al profesorado de la Comunitat, lo que supone que uno de cada cuatro profesores estará de baja por una enfermedad relacionada con los problemas de ansiedad.

La encuesta se ha realizado mediante un cuestionario dirigido a 1.300 trabajadores, grupos de discusión y entrevistas en profundidad a directores y profesores de 14 Comunidades Autónomas, el 11,02 por ciento realizadas en la Comunitat valenciana, es decir, 124 cuestionarios. Este estudio revela que un 37,5 por ciento de los docentes se considera bastante estresados por la interacción con los alumnos y que Los comportamientos disruptivos en las aulas generan altos niveles de stress a más del 50 por ciento del profesorado.

Por su parte, el técnico de Prevención de FETE-UGT, Fernando Alvarez, ha explicado que los comportamientos que más estrés generan en los docentes son, por este orden, la falta de respeto de los padres ante los problemas con disciplina, enseñar a personas que no valoran la educación, impartir clase a un grupo tan elevado de alumnos, presenciar agresiones entre los alumnos y sufrir agresiones verbales por parte de los alumnos.

Según estos datos, un 7,4% del profesorado asegura que alguna vez le ha agredido algún alumno, y casi un 2% admite que los alumnos le agrede físicamente, al menos, una vez al mes. No obstante, los comportamientos que se dan con mayor frecuencia en la relación entre alumnos y profesores son los disruptivos, aquellos que mediante constantes interrupciones de la clase, gamberradas, contestaciones o el hablar continuadamente en clase, impiden el normal desarrollo de la tarea docente. Este comportamiento se produce con mucha frecuencia según el 34,1% del profesorado, y 'con cierta frecuencia', es decir, al menos una vez al mes, para el 56,5% de los docentes.

Públicos frente privados

Por sexos, las mujeres sienten niveles de estrés más elevados que sus compañeros masculinos, especialmente las profesores jóvenes de entre 20 y 30 años con menos de 3 años de experiencia laboral y que trabajan en un centro escolar de titularidad pública con más de 50 trabajadores.

Al respecto, ha explicado que la encuesta también revela diferencias entre los centros públicos y los privados concertados. Así, los comportamientos disruptivos son muchos más frecuentes en las aulas públicas sin embargo en los privados o concertados los profesores suelen tener mayor problemas con los padres porque al pagar por la enseñanza su nivel de exigencia es también mayor.

Ante estos datos la secretaria de Salud Laboral y medio Ambiente de FETE-UGT, Lydia Asensio, ha constatado la necesidad de acometer campañas de valoración del profesorado porque "la prevención siempre resulta mucho más barata que curar".

Así, entre las medidas que son necesarias introducir para la prevención de comportamientos considerados como "violencia escolar" ha citado la atención a la diversidad para la atención del alumnado, disminución de las ratios, ampliación de las plantillas, dotación de nuevos perfiles profesionales que permitan reforzar la labor docente, formación en habilidades sociales, favorecer la mediación como metodología para la solución pacífica de los conflictos en los centros, entre otras.

"Todo ello tiene que venir acompañado de la implicación de toda la comunidad educativa, de una mayor participación de los padres y de un reconocimiento de la labor docente y en este sentido va encaminada nuestra reivindicación de una ley estatal que reconozca la autoridad pública para todo el profesorado", ha señalado.

Mostrar comentarios

Códigos Descuento