Junta publica en BOJA la subasta de 27 vehículos oficiales y mantiene su criterio de austeridad en el gasto

La consejera de Hacienda y Administración Pública, Carmen Martínez Aguayo, ha anunciado que esta semana se ha publicado en el Boletín Oficial de la Junta de Andalucia (BOJA) la subasta de 27 vehículos oficiales, y ha asegurado que la austeridad en el gasto "ha sido y es un criterio que nos ha acompañado siempre, antes y ahora, en tiempos de bonanza y en época de crisis".

La consejera de Hacienda y Administración Pública, Carmen Martínez Aguayo, ha anunciado que esta semana se ha publicado en el Boletín Oficial de la Junta de Andalucia (BOJA) la subasta de 27 vehículos oficiales, y ha asegurado que la austeridad en el gasto "ha sido y es un criterio que nos ha acompañado siempre, antes y ahora, en tiempos de bonanza y en época de crisis".

En su comparecencia en comisión parlamentaria, Martínez Aguayo ha precisado que esta subasta es una actuación que se integra en su estrategia de "gestión activa del parque móvil para reducir el gasto", junto a iniciativas como el cambio de vehículos por otros de menor cilindrada o el uso de vehículos híbridos.

La consejera indicó que en 2009 estas medidas de austeridad mediante la reducción del gasto operativo no vinculado a la prestación de servicios fundamentales permitieron generar un ahorro de 170 millones de euros.

De éstos, en el Capítulo I la congelación de retribuciones de altos cargos y amortizaciones de vacantes en la Administración General permitieron ahorrar 39,5 millones de euros y se logró un ahorro de 22 millones la actuación sobre otros conceptos como horas extraordinarias o sustituciones.

En el Capítulo II se experimentó una reducción media del 14 por ciento en los conceptos de carácter operativo no vinculados a la prestación de servicios, lo que generó un ahorro de 87,5 millones de euros. En concreto los gastos de mantenimiento, reparación y conservación se redujeron un 10 por ciento; el gasto en materia de oficinas un 17 por ciento; la partida para comunicaciones se redujo un 13 por ciento; el gasto en transporte cayó un dos por ciento; el gasto en primas de seguros, un seis por ciento; los gastos de protocolo, publicidad e información institucional se redujeron a la mitad; la partida para reuniones y conferencias y las destinadas a indemnizaciones por razones de servicio se redujeron un 13 por ciento y el gasto derivado de trabajos realizados por otras empresas y profesionales se rebajó en un 15 por ciento.

El resto de capítulos se generó un ahorro de 20,8 millones de euros, con medidas de reducción del gasto vinculado a los servicios generales.

Asimismo en el presupuesto de 2010 en el momento de su aprobación se preveía un ahorro a finales de año de más de 134 millones de euros. En ese sentido, la consejera ha destacado que se han limitado la creación de nuevas plazas servicios generales al 15 por ciento de tasa de reposición, se han reducido el número de altos cargos y se han congelado por segundo año consecutivo sus retribuciones y se han limitado las retribuciones de los directivos de empresas públicas.

Reduccion en dos años

La consejera destacó que entre 2008 y 2010 se han reducido los gastos de información, divulgación y publicidad un 59 por ciento; se han reducido un 55 por ciento los gastos en atención protocolaria y representativa; la partida de información institucional se reduce un 58 por ciento; la participación de edición de publicaciones cae un 40 por ciento; la de estudios y trabajos técnicos un 32 por ciento; la de material de oficina un 31 por ciento; la de gastos diversos un 30 por ciento; la de comunicaciones telefónicas un 27 por ciento; la de locomoción y dietas se ha reducido un 23 por ciento; y la de reparaciones, mantenimiento y conservación un 22 por ciento. Asimismo, se han reducido en un 32 por ciento acumulado entre 2008 y 2010 los gastos de capital no prioritarios de los programas de servicios generales de la administración, logrando un ahorro de casi 53 millones.

La consejera ha destacado el "alto grado de eficiencia" de la política de austeridad de la Junta de Andalucía y la gestión del gasto, que se ve reflejado en el peso del gasto corriente sobre los presupuestos (gastos no financieros), del 74,7 por ciento, frente al 87,4 por ciento de Madrid o 81,8 por ciento de Valencia.

Asimismo, ha destacado el menor peso de los gastos de funcionamiento, tres puntos por debajo que Madrid y seis menos que en Valencia; y el peso del Capítulo II sobre el gasto no financiero, que es menor en Andalucía que en comunidades como Madrid, Castilla y León, Galicia o Valencia.

Analizando el gasto por habitante en relación con otras comunidades autónomas, Andalucía "se situa ligeramente por encima de la media y muy debajo de comunidades como Extremadura, Castilla-La Mancha o País Vasco, que presentan mayor gasto por habitante, y no es que allí tengan más servicios". ENDEUDAMIENTO

Para la consejera, otra prueba de la buena gestión es la situación del endeudamiento, que a junio de 2010 se situa en el ocho por ciento del PIB, 1,8 puntos por debajo de la media, y que se ve superada "holgadamente" por comunidades como Valencia, Baleares, Cataluña, Castilla-La Mancha o Galicia.

También destacó los niveles de deuda por habitante (1.373,29 euros) que es inferior en un 38,25 por ciento a la media de las comunidades autónomas, tras lo que apuntó que la deuda de Cataluña y Baleares "supera en dos veces y media la de nuestra Comunidad" y Valencia es 2,3 veces la deuda per capita andaluza. Agregó que algo similar ocurre con el endeudamiento del sector público.

Destacó que "a pesar de que este año ha tenido que elevar el nivel de endeudamiento, Andalucía sigue siendo una región relativamente poco endeudada y soporta la comparación con otras comunidades autónomas, estando por debajo de la media".

"Somos una comunidad que actúa de forma responsable con el gasto público, relativamente poco endeudada y que soporta las comparaciones", agregó la consejera, que aseveró que Andalucía "seguirá siendo austera, seguirá tomando medidas para incrementar en lo posible los márgenes de ahorro".

Aseveró que "la austeridad ha sido y es un criterio que la Administración andaluza tiene en cuenta a la hora de gestionar el dinero público, un criterio que nos ha acompañado siempre, antes y ahora, en tiempos de bonanza y en época de crisis".

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