El titular del juzgado de instrucción número 1 de Benidorm (Alicante) ha dejadoen libertad provisional con cargos a los dos agentes, imputados por los delitos de torturas y contra la integridad moral, detención ilegal, falsedad documental, lesiones, amenazas, coacciones y extorsión.

El auto del juzgado establece la obligación de comparecencia cada lunes de cada semana y cuantas veces fueren llamados ante el juez o tribunal, y les prohíbe aproximarse a menos de quinientos metros de la localidad de Altea, según recoge el mismo escrito.

Ante esta situación, el primer edil de Altea ha ordenado la apertura de un expediente disciplinario para los dos agentes y la suspensión provisional de sus funciones mientras duren las medidas judiciales.

Ripoll además ha nombrado al jefe de Policía Local de Altea, como instructor del expediente, tal y como lo marca la ley, y ha nombrado un secretario.

De igual modo, el alcalde pidió este lunes a la jefatura de la Policía Local de Altea, "que obtuviese de los dos agentes su tarjeta de identificación y su placa y que fuese depositada en el armero su arma reglamentaria".

Asimismo y custodiados por una patrulla, los dos agentes acudieron al cuartel de la Guardia Civil, donde pudieron recoger todos los objetos que fueron registrados y acudieron al retén de Policía Local para recoger sus pertenencias, han explicado las mismas fuentes.

El alcalde ha recordado su deseo de que "se aclaren las acusaciones en un sentido u otro, que se declare la sentencia y nos permita seguir actuando y tomando las medidas oportunas".