"No quiero hacer valoraciones, pero pido a Kate que vuelva y nos cuente su versión de lo ocurrido", afirma Ghaffur en declaraciones que publica hoy el diario británico "The Sun".

"En beneficio de todos, incluida ella misma, cuanto antes hable con nosotros, mejor", agrega el jefe de la policía.

Moss, de 31 años, se ha visto involucrada en un escándalo por consumo de cocaína después de que la prensa sensacionalista británica publicase fotos en las que se la veía tomando supuestamente esa droga junto a su ex novio, el cantante Pete Doherty, conocido por sus problemas de drogas.

La modelo, que perdió una serie de contratos de publicidad a raíz de lo ocurrido, viajó a Estados Unidos, donde estuvo en una clínica de rehabilitación.

Según la prensa británica, Moss acaricia la idea de establecerse en Los Angeles (California) con su hija de tres años, Lila Grace.

Ghaffur descarta, sin embargo, que vaya a pedir oficialmente a Estados Unidos la extradición de la modelo o que vaya a enviar a agentes a ese país para interrogarla.

El jefe policial señala que la investigación sobre la red que suministró la droga supuestamente consumida en un estudio de grabación musical londinense marcha muy bien y asegura que "va a haber detenciones".

"Hemos llevado a cabo registros en el estudio donde se filmó el incidente y tenemos la grabación digital de lo ocurrido, que los investigadores analizan ahora atentamente", explica.

Según Ghaffur, la posición de la policía es que no hay que limitarse a perseguir a quienes suministran la droga sino que hay que ocuparse también de los consumidores, ya sean de la clase media o alta.

"Estoy especialmente preocupado por el daño que produce el uso de drogas en el mundo de la moda o el espectáculo ya que hay muchos jóvenes fácilmente impresionables que quieren hacer carrera en esos sectores y pueden convertirse en víctimas fáciles de los narcotraficantes que se infiltran en ese mundo", agrega el jefe policial.

De nuevo enamorada, según la prensa británica

La modelo, según la prensa sensacionalista inglesa, podría haber encontrado de nuevo el amor en un joven de tan sólo veinte años al que conoció tras salir de la clínica de rehabilitación.